Beto da Silva, jugador del Deportivo la Coruña, explicó que si el equipo colista de LaLiga SmartBank no quiere que continúe en el plantel, lo acatará, pero dejó claro que su intención es quedarse en el equipo y reconoció que el DT, Luis César Sampedro, le ha pedido más "agresividad" en el campo.
En su primera temporada en el Deportivo, a pesar de no haber sido titular todavía y de que el equipo sea el último clasificado, el delantero peruano confesó que se encuentra "muy feliz".
"Estoy muy contento, en una liga competitiva y un club histórico. Si el Dépor quiere que me quede; yo, feliz. Daré el máximo para ayudar a salir de esta situación. Si el Dépor no me quiere, tendría que irme, pero yo no quiero irme. Sé dónde estoy y sé lo que estoy jugando", declaró en conferencia de prensa.
Por el atacante blanquiazul, el Deportivo dispone de una opción de compra tras haber sido incorporado como parte de la salida del uruguayo Diego Rolan al fútbol mexicano.
El pasado domingo, tras la derrota ante el Zaragoza (1-3), su entrenador, Luis César Sampedro, destacó sus virtudes técnicas (dio una asistencia con un toque de taco) y dijo que no tenía más protagonismo porque a los delanteros les pedía más en ataque y en defensa.
"Hemos hablado, he tenido conversaciones con él y me ha pedido que tácticamente tengo que tener algo más de agresividad. Sé que es de lo que menos tengo, pero estoy trabajando cada día para demostrar que lo puedo hacer", admitió Beto.
Reconoció que los que menos juegan tienen "un poco de impotencia" por no poder ayudar más al equipo a salir de la situación complicada en la que se encuentra, si bien precisó que todos han "tenido oportunidades" y todos han salido "derrotados".
Beto se mostró optimista y aseguró que a pesar de estar a ocho puntos de la permanencia van a salir del "mal momento" que atraviesan. EFE