La participación de los Tigres en el mundial de clubes dejó en claro que es urgente y prioritario para el fútbol mexicano regresar a la Copa América y a la Copa Libertadores.
La Federación Mexicana de Fútbol, la LigaMX, la CONCACAF y la CONMEBOL deben entender que lo mejor para ambas confederaciones es que los equipos mexicanos regresen a los dos torneos continentales más importantes de América y en ese sentido deben trabajar para converger intereses deportivos y económicos.
Yon de Luisa, presidente de la FMF y Mikel Arriola titular de la LigaMX deben trabajar en esa dirección y dejar de pensar y tratar de convencernos de que lo mejor es converger con la MLS.
La diferencia que existe a nivel de clubes entre el fútbol europeo y el resto del mundo es más que evidente y no necesitamos de un mundial de clubes para comprobarlo, pero nuestro fútbol no podrá aspirar a ser más que un simple animador medianamente competitivo si no se somete a la más alta exigencia posible.
La CONCACAF debe buscar la manera de poder generar una sinergia deportiva con la CONMEBOL, no hacerlo provocará que el fútbol a nivel de selecciones y clubes de CONCACAF se quede como está y no pueda trascender.
La FMF y la USSOCCER deben ampliar su visión estratégica y de negocio no solo entre ellos está la panacea económica y deportiva del fútbol en el continente americano.
No encontrar un camino para volver a competir en Copa América y Copa Libertadores tendrá consecuencias y la principal será que deportivamente las selecciones del área Norte, Centroamérica y el Caribe fracasen en su intento por trascender en la Copa Mundial del 2026.
Jesús Martínez presidente de Grupo Pachuca ha dejado en claro que participar en Copa Libertadores también deja un beneficio económico importante para los equipos participantes.
En lugar de pensar hacer una liga en conjunto la FMF, la USSOCCER, la LigaMX y la MLS deben buscar la manera de integrarse a la Copa América y a la Copa Libertadores, lograrlo representará para todos un enorme beneficio deportivo y también económico.
Quienes trabajan en dirección contraria deben marcharse porque lo único que están haciendo es mentir y preocuparse por llenar sus bolsillos, mientras el fútbol mexicano y la CONCACAF misma se quedan a la deriva burocrática de sus caciques y a merced de una corriente donde solo sopla el viento de la mediocridad.