Los cinco penales que fueron fallados por la selección nacional Sub 20 en el Premundial de la Concacaf ante Guatemala, son puñaladas que dejarán daños en el futbol mexicano a nivel deportivo y también en lo administrativo, porque el proyecto de la Federación Mexicana de Futbol contemplaba asistir a Indonesia el próximo año y también a los Juegos Olímpicos de París 2024.
El día después el análisis fue claro y contundente, nadie ocultó que se trataba de un fracaso, así lo admitió Gerardo Torrado, director general deportivo de la Federación Mexicana de Futbol. “La eliminación es un golpe muy fuerte. El resultado, con justa razón, se ha calificado como fracaso; es vergonzoso”.
A buscar soluciones
No hay duda que la generación que disputó este Premundial quedará marcada por este enorme tropiezo y el riesgo de que muchos jugadores se pierdan es muy alto. Y más si se toma como antecedente directo al prometedor grupo que también falló en el camino a Pekín 2008.
De esa generación de jugadores, de los cuales muchos habían sido campeones del mundo Sub 17 en 2005, solo seis de los 20 convocados lograron consolidar una carrera larga en la Liga Mx, mientras que 14 se perdieron.
Por esa misma razón, en la Federación se tiene claro que hay que buscar soluciones para el futuro a mediano y largo plazo, porque este grupo aún tiene camino por recorrer. “Vamos a hacer un plan de desarrollo deportivo para que los jugadores de esta categoría no los perdamos en el camino, que les podamos brindar competencias importantes para desarrollarse y en el futuro verlos en la Selección mayor, trabajaremos con los clubes el plan de desarrollo de estos jóvenes futbolistas”, dijo Torrado.
Raúl Gutiérrez, nuevo entrenador del equipo Sub 20 de Cruz Azul y con experiencia en selecciones menores, coincidió en que se debe hacer un trabajo para que sus carreras no se pierdan, pese a la falta de roce que se perderá por no estar en estos torneos.
“Es complicado, porque muchos de estos jugadores la experiencia que adquieren jugando un Mundial y unos Juegos Olímpicos los hace mejores futbolistas, no tener esa participación es algo que lo van a tener que tomar de otra forma y ojalá que lo logren y se desarrollen de otra manera para que puedan tener ese nivel de competencia y esa experiencia”, dijo el Potro, quien salió campeón mundial Sub 17 en el 2011 y también dirigió a la selección olímpica en Río 2016.
Continuidad, la clave
Y sí, se deberá hacer todo lo posible porque este grupo no se pierda en el camino, porque hay materia prima a la que se le deberá rescatar, pensando en que se trata del futuro del futbol mexicano tanto a nivel de clubes como en la propia selección nacional.
De los 20 jugadores que estuvieron en Honduras, 12 ya han tenido por lo menos un minuto de juego con el primer equipo, ya sea en la Liga Mx o en torneos internacionales; la gran mayoría ha tenido sesiones de entrenamiento también con el equipo estelar y ese deberá seguir siendo el camino a seguir.
El jugador más avanzado de este equipo es Fidel Ambriz, el mediocampista de León que registra ya 37 partidos con La Fiera en distintos torneos. Después le sigue Bryan González con 27 partidos en el máximo circuito. O Heriberto Jurado de Necaxa, quien también suma 17 encuentros en Primera División.
La clave para que estos jugadores no se pierdan como en anteriores procesos es que sus clubes no solo los arropen de palabra, sino que les abran camino en el campo de juego. La generación Sub 20, está en riesgo por este gran tropiezo, pero el daño se puede minimizar con decisiones acertadas.
MGC