El futbol mexicano ha tenido capítulos sui generis, uno de ellos fue protagonizado por Osmar Donizete, el delantero brasileño que fue figura los Tecos de la UAG, donde fue campeón, pero el episodio que vivió se dio en el Torneo de Verano 2000, cuando el sudamericano fichó por Tigres.
Celaya era uno de los clubes que estaba interesado en el brasileño, pero en el último día del cierre de fichajes los felinos lo registraron como jugador suyo, Enrique Fernández entonces presidente de los Cajeteros salió al paso y aseguró que tenían un precontrato firmado con el brasileño desde finales de 1999.
Las autoridades de la Federación Mexicana de Futbol abrieron una investigación sobre el caso y se armó una comisión que lo revisaría, otra de las partes interesadas era el famoso promotor Guillermo Lara, quien lo quería llevar a Celaya para asegurarse su pago por dicho traspaso.
A algunos medios les fueron filtrados los contratos, Enrique Borja, entonces presidente de Tigres y de la FMF aseguró el trato entre los felinos y Donizete era legal y dio luz verde para que Víctor Manuel Vucetich, timonel de los universitarios lo alineara, y así pasó, pues jugó cuatro partidos, incluido un clásico regio que Tigres ganó por 6-3 y en el que La Pantera marcó un gol.
La comisión que investigó el caso determinó que la firma de Donizete con Tigres era apócrifa, como solución los directivos ordenaron la repetición de los partidos en los que Donizete tuvo participación y que el brasileño no tuviera actividad en dichos compromisos, en la repetición de ese clásico regio el resultado fue de 0-0, por lo que aquel episodio de la firma falsa evitó que en el registro oficial se asentara una goleada escandalosa a los Rayados de Monterrey.
El clásico regio se jugará este sábado en el Estadio Universitario, y el nombre de Donizete vuelve a la escena para recordar un episodio oscuro, pero de risa entre ambos equipos.
EORM