América no cede terreno y golea al Pachuca para mantener el liderato

América afianzó su liderato del torneo, goleó a Pachuca 4-0 en un partido pasado por lluvia, un juego rocoso y áspero que no se desarrolló como se hubiera querido, pero en el que los de Coapa supieron imponer su calidad individual y colectiva.

Jardine volvió a guardar a Diego Valdés, no quiere correr riesgos con el chileno, prefiere tenerlo en plenitud para el futuro, cuando el calendario esté más ligero y lleguen citas de alta envergadura.

Asimismo, el brasileño hizo algunos cambios, 'Cabecita' de titular, igual que Cáceres en la central, Zendejas y Henry de vuelta al once. Y le dio descanso a Quiñones, Lichnovsky y Brian.

América buscó imponer su jerarquía, vive un mejor momento que los 'Tuzos' tiene un plantel de más pedigrí, pero la fuerte lluvia impidió que el partido fluyera a ras de pasto.

Pachuca marcó, pero Di Yorio estaba adelantado, después, el argentino robó una pelota, pero Illian Hernández no pudo rematar a gol, luego Cabral probó de media distancia. La respuesta de las Águilas fue una buena asociación entre Suárez y Henry que Zendejas no pudo concluir.

Pero la insistencia de los azulcrema les permitió abrir la lata, Suárez le pegó a un tiro libre, el portero hidalguense escupió el balón y Henry acabó empujando la pelota. Las Águilas se ponían por delante al final del primer tiempo, incluso lograron aumentar su ventaja, pero el segundo del yucateco no subió a la pizarra por fuera de juego.

En el complemento, Pachuca pareció dar un paso al frente para reaccionar, Malagón bloqueó un tiro libre de Di Yorio, y en una transición rápida entre Henry y Zendejas, este último marcó el segundo al 58’.

El equipo de Jardine gestionó su ventaja, no dejó de mirar al arco rival; los Tuzos hicieron su esfuerzo, pero no les alcanzó para recortar distancias. En cambio Julián Quiñones salió desde la banca para marcar el tercero en la recta final del partido y en la compensación 'Cabecita' Rodríguez selló la goleada. América mantiene el pulso, impone su músculo y no cede la cima.

AVV

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