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El ex director técnico de la selección de Honduras considera que el Tricolor recuperó identidad con la elección de Jaime Lozano
MÉXICO -- Pese a tener claro que las distancias se han acortado entre las selecciones de la Concacaf, el ex técnico nacional de Honduras, Ramón ‘Primitivo’ Maradiaga, señala que México siempre es el rival a vencer no solo para los catrachos, sino para todos los rivales del área sobre todo centroamericanos.
En entrevista para ESPN, Ramón Maradiaga afirma que México es un rival para medir la capacidad futbolística que se tiene, algo que podrá verse en el duelo del próximo 17 de noviembre en Honduras cuando ambos equipos busquen el boleto a la Copa América del verano 2024.
“Indudablemente, no solamente para Honduras, sino para todos los países especialmente de Centroamérica es un reto grande porque sabemos la dimensión del futbol de México, lo que ellos tienen; pero también soy de los que pienso que en el futbol son 11 contra 11 y no podemos estar midiendo que porque el Estadio Azteca o que porque la altura, que porque acá en Centroamérica hay un ambiente hostil contra la Selección de México”.
Explica Ramón Maradiaga que para Honduras, Guatemala, El Salvador y Costa Rica hay un aliciente especial “porque todos vemos a México como el rival a vencer e indudablemente que no es que se van a redoblar esfuerzos, pero por lo menos va a haber una preparación adecuada para poderlo enfrentar y ver si se logra sacar el resultado y para poder seguir avanzando”.
Para Ramón Maradiaga, la elección de Jaime Lozano como técnico nacional “ha venido a darle una identidad a México, después de tantos técnicos extranjeros, colombianos, argentinos o el sueco Sven-Goran Eriksson” y en contraparte añade que Honduras no llegará en buen momento, pues el técnico nacional Reinaldo Rueda “ha tenido pocos trabajos que no ha podido armonizar, no ha podido estructurar un equipo para la competencia”.
Pasó de moda el recibimiento hostil
En cuanto al recibimiento que le espera a México en Honduras, señala Ramón Maradiaga que “ya pasó de moda” el recibirle hostilmente y aseguró que a partir de que él dirigió al seleccionado catracho en 1996, todo cambio y dejó de ponerse música en los hoteles para desvelar a los integrantes del Tricolor.
“Recuerdo que en las eliminatorias anteriores a cuando le ganamos por primera vez a México en el Estadio Morazán (2-1), había un ambiente bastante bélico, si podemos decirlo así; pero justamente en una plática el presidente de la Federación de Futbol de Honduras me preguntó cómo recibiríamos a México; me preguntó si hacíamos lo de antes de detener en migración, de tenerlos en la pista, algo que ahora no está en lo que se denomina fair play; Respondí que había que recibirlo bien, que le diéramos una bienvenida hospitalaria de la afición hondureña, que no hubiera lo que antes se manejaba”.
Agregó el actual entrenador del club Universidad Pedagógica Nacional que ya no ha habido ningún tipo de complicación cuando México visita Honduras. “Habrá un ambiente fuerte en el estadio porque todos queremos ganar, pero el mismo escenario también tiene sus límites de hasta dónde llega la afición y cuál es el radio de acción de los jugadores”.