En medio de la polémica, el final del romance entre Gabriel Soto e Irina Baeva nos trae un nuevo capítulo relacionado con una supuesta boda. A lo largo de su relación, la pareja ha enfrentado momentos en los cuales el matrimonio parecía inminente, pero no se concretó hasta, presuntamente, unos cuantos meses antes de que se hiciera público el final de esa historia de amor sin final feliz.
Desde hace tiempo, tanto Gabriel Soto como Irina Baeva habían tocado la puerta del matrimonio en diversas ocasiones. Sin embargo, obstáculos y compromisos profesionales pospusieron este paso crucial para su relación. La propia artista rusa, en una entrevista con la revista Hola!, dio a conocer detalles impactantes sobre una boda que según ella tuvo lugar en marzo de este mismo año y que habría sucedido en la propiedad que su entonces novio tiene en Acapulco.
IRINA BAEVA DA DETALLES DE SU SUPUESTA BODA
En sus propias palabras, Irina Baeva confirmó: “El 27 de marzo del 2024, nosotros nos casamos. La hicimos en Semana Santa, la hicimos en Acapulco, en la casa que tiene Gabriel ahí. La hicimos en un círculo muy íntimo”. Esta revelación contradice las declaraciones previas y la percepción pública sobre el estado actual de su relación, pues es un tema que sorprenda a propios y extraños debido a que no estábamos al tanto de esa ceremonia.
El enlace, según Baeva, fue un evento íntimo en el que estuvieron presentes las hijas de Gabriel Soto, así como algunos familiares y amigos cercanos. Esta decisión de casarse fue descrita como algo simbólico y personal, hecho para ellos mismos como pareja. “Decidimos que las únicas personas a quienes realmente nos importaba esto y hacerlo así, éramos nosotros mismos”, indicó Irina Baeva, dejando en claro que había sido algo solo representativo para el disfrute de ellos y de los que más cerca han estado de su aventura romántica.
A pesar de los planes para legalizar la unión matrimonial, Irina Baeva explicó que ciertos trámites burocráticos complicaron el proceso, algo común para extranjeros en México, así que no se realizó en el momento y el papeleo quedó inconcluso. “Habíamos pospuesto la fecha de firmarlo porque necesitas avisar con anticipación y, la verdad, es que por nuestro trabajo luego es un poco complicado”, dijo ella. Este retraso, combinado con las exigencias de sus carreras, eventualmente pudo haber contribuido a las dificultades en la relación.
IRINA BAEVA SIGUE ENAMORADA DE GABRIEL SOTO
Además de la logística, Baeva también abordó la ruptura pública de la relación, señalando que fue Gabriel Soto quien puso fin a su vínculo amoroso. A pesar de esto, Irina Baeva confesó que sigue enamorada de él y que había compartido sueños de formar una familia juntos. “La gente que me conoce sabe que soy la persona más familiar. Claro que me veía como mamá, por supuesto, y es mi sueño ser mamá en algún momento”, añadió la actriz de 31 años.
La relación entre Gabriel Soto e Irina Baeva ha sido objeto de constante escrutinio mediático y especulación pública. La revelación sorpresiva de una boda previamente no anunciada añade un nuevo capítulo a esta especie de telenovela, planteando preguntas sobre los motivos detrás de esta decisión y el impacto en sus vidas personales y profesionales. No obstante, teniendo en cuenta cómo va todo, es probable que sigue apareciendo más episodios en los próximos días.
GABRIEL SOTO DESCARTA QUE HAYA SIDO UNA BODA
En medio de la controversia generada por las recientes declaraciones de Irina Baeva sobre una supuesta boda en Acapulco, Gabriel Soto ha salido al paso para aclarar la situación. El reconocido actor, protagonista de la exitosa telenovela “Mi Camino es Amarte”, ha desmentido categóricamente que haya contraído matrimonio con la actriz rusa y dijo que solo se trataba de una sesión de fotos que ya había estado planificada para llevarse a cabo allí y en la fecha mencionada por la actriz europea radicada en suelo mexicano.
En declaraciones a varios medios de comunicación, Gabriel Soto explicó: “Hicimos unas fotos en mi casa de Acapulco, pero no fue una boda. Fueron nada más, unas fotos donde estábamos vestidos de novios, pero no fue una boda”. Con dicha afirmación contradice directamente las palabras previas de Irina Baeva, quien había detallado un evento íntimo celebrado en marzo de este año.
Las imágenes compartidas por la pareja en redes sociales, luciendo atuendos de novios y compartiendo momentos afectuosos, habían desatado especulaciones sobre un posible enlace matrimonial secreto. Sin embargo, según Soto, estas fotos simplemente formaban parte de una sesión fotográfica planificada.