Las lesiones han interrumpido reiteradamente la carrera del defensa lateral César Ibáñez, han sido un obstáculo en el ascenso que desde muy joven empezó a emprender como rojinegro y luego como albiverde, pero ahora que está de regreso, su objetivo es emprender de nuevo en el balompié.
Este jueves, el tapatío habló sobre el proceso que lleva tras recibir el alta médica y estar compenetrado al 100% en la pretemporada con el equipo lagunero.
"Yo lo veo como una nueva oportunidad y quiero aprovecharla al máximo, estoy al 100%, es cuestión de entrenamientos y de disciplina".
Está motivado y sin miedo después de 3 cirugías a las que ha sido sometido en la rodilla izquierda.
Cerca está de cumplir un año sin jugar un partido de Primera División, así que se siente muy entusiasmado con su regreso.
Lejos de pensar en un retiro temprano, como le ha sucedido a varios ex jugadores, se concentra en retomar su camino como futbolista y pelear por un puesto titular en el once de José Manuel de la Torre.
Ibáñez expuso: "Día a día voy mejorando, agarrando ritmo de juego, tuve participación en el amistoso con Pumas y espero tener participación mañana ante la Sub-20 para seguir recuperando esa velocidad, los giros y los saltos que aún me faltan".
De todo lo que ha pasado este tiempo, comentó: "Fueron días difíciles pero gracias a Dios hubo gente que me apoyó siempre, mi familia, mis papás, mis hijos, mi novia, mis compañeros y gente del club de fisioterapia que siempre estuvieron al pendiente de mí y eso me ayudó bastante".
"Yo lo veo como una nueva oportunidad y quiero aprovecharla al máximo, estoy al 100%, es cuestión de entrenamientos y de disciplina".
Pensar en el retiro fue lo que de alguna manera le hizo replantear su vida, ordenar sus ideas y establecer sus objetivos.
"Cuando me dieron la noticia de que necesitaba otra cirugía, sinceramente sí pasó por mi cabeza el retiro, es muy difícil pero tengo un círculo de amistades muy unido que me alentaron a intentarlo una vez más y quiero agradecer eso regresando y sabiendo que, hoy por hoy, estoy más fuerte que nunca", dijo.
Ahora, una vez más reintegrado al trabajo con el equipo, el tapatío trabaja en ponerse a punto en lo físico, así como en lo futbolístico, ilusionado con jugar el próximo torneo.
"El Profe me dice que tome el tiempo necesario porque, después de tanto lesionado, es entendible que yo no vaya al choque, ya que a final de cuentas son entrenamientos y me dice que, el día que esté listo para competir en los entrenamientos, lo haré también contra los rivales", estableció el jugador, muy optimista.
Está motivado y sin miedo después de 3 cirugías a las que ha sido sometido en la rodilla izquierda.
Añadió que siente una emoción fuerte cada vez que se acerca el momento de iniciar la competencia, "es lo que más extraño, jugar, competir, porque llevar la playera del Santos es un privilegio y espero hacerlo pronto y dignamente", resaltó Ibáñez.
Recordó que la más reciente lesión la sufrió en un partido contra América, el 6 de febrero pasado en el Estadio Azteca, en una desafortunada acción en la que piso mal luego de disputar el balón.
JFR