Hoy cumpliendo la cuarentena obligatoria en un hotel tras arribar de su país el jueves, contó que no poder ir a River Plate de Argentina fue su gran espina que aún le duele en la carrera futbolística.
En el 2016 debutó en Danubio de su país, donde jugó a nivel internacional en el 2017 y ahí Marcelo Gallardo preguntó por él: “Me llegó la noticia, estaba muy contento y esperanzado, sabía que éramos tres jugadores para el mismo puesto, pero le tocó a otro", refirió.
"Sentí que podía dar más, después que no se pudo dar, seguí metiéndole en el club, sabía que tenía oportunidades, viéndolo ahora me quedó esa espinita por todo lo que logró River y que pude estar ahí”, fue la confesión de Fernández en charla con Fútbol a lo Grande (1080 AM).