Hernán Rengifo: así se va un líder amable [OPINIÓN]

Pocas veces ha sido tan unánime la tristeza. Y pocas veces la despedida de un futbolista es más tema que los próximos 6 meses del campeonato. No solo porque no es el más carismático, el que da más notas o quien nunca reclama si va al banco; precisamente por eso. Hernán Rengifo, el ‘9’ capitán de la ‘U’, representa todas esas rarezas y, por esas culpas, se va del club en silencio, igual al día en que volvió. Sobra decir que deja un forado difícil de ocultar. Un plantel entero podría entrar ahí.

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Rengifo se terminó de formar en la ‘U’ pero nunca fue visto como un ‘U’, hasta hoy. Un poco porque muy joven se mudó a San Martín para tener minutos y salir campeón, y también porque en su regreso europeo lo buscaron de otros equipos, antes que de su casa. Fue campeón en Cristal y en Aurich, pero nunca se lo veía del todo como un rival: en Universitario, en su aire y en sus problemas, en su futuro y en sus crisis, la posibilidad de un regreso se firmaba. Yo diría que los goles que hizo en el último minuto a Alianza y Cristal, también.

Volvió con Chemo del Solar, que alguna vez comentó que ni siquiera tuvo que convencerlo. “Yo sé de qué me vas a hablar”, le dijo. Lo arreglaron en 2 minutos y después, llegaron 19 goles. Del Solar había sido el único técnico de selección –mitad por carencias, mitad por convicción- que puso de titular al Rengifo más goleador, al Hernán del Lech Poznan: categoría 83, sus números de ‘9’ (30 en dos temporadas) no alcanzaban para competir antes de la Eliminatoria 2010 con Jefferson Farfán y Paolo Guerrero, los delanteros top de Perú. Y aunque Rengifo nunca dejó de pensar en la selección, en la Videna pocas veces pensaron en él.

Resuelta su salida, hechos los números, fortalecido Melgar que lo fichó, queda un mensaje que aumenta más la tristeza de los hinchas: se va de la ‘U’ un profesional. Nunca dejó de entrenar, nunca declaró de más, nunca salió de noche. Y peleó en el campo, donde otros creen que solo sirve mandar besitos. Fue precisamente por esas cosas que Hernán Rengifo nunca tuvo prensa. Nunca tuvo ‘prensa’. Fue lo que Jorge Valdano llama, “un líder amable”. Cuesta entenderlos hasta que se van. Y siempre es demasiado tarde. En la 'U' no tuvo sitio un profesional así.