Ronaldinho demostró su calidad nuevamente. En un partido amistoso desarrollado en el Pacaembú, ante 11 mil personas, el crack regaló magia y lujo. Y también anotó un golazo desde media cancha.
No importó la lluvia o el frío intenso, igual Ronaldinho derrochó magia, técnica y, sobre todo, golazos. El crack brasileño batió al portero Sidao desde media cancha.
Las cámaras no captaron el momento en vivo; pero por las repeticiones podemos visualizar la majestuosidad de la jugada. Ronaldinho recibió el esférico y no dudo. Remató un potente remate desde media cancha y convirtió un golazo.