Sporting Cristal | Los números mienten, las tablas engañan, las estadísticas son un espejismo en el que el equipo que pelea por ser líder del Torneo Clausura no le puede ganar al equipo que lucha por no perder descender a Segunda. En lo irreal del fútbol peruano, Sporting Cristal dejó pasar la oportunidad de tomar la punta, despertar hoy tranquilo como el líder del torneo y afrontar los últimos cuatro partidos con las claras oportunidades de ser campeón. Esas chances, ahora, siguen igual que ayer y dependen de lo que pase con Universitario de Deportes y Alianza Lima.
Su nombre es Joffre Escobar, alcanza el 1.80 metros de estatura y vino desde Ecuador hace menos de 4 meses a un San Martín urgido de gol y experiencia para no perder la categoría en la Liga 1. Con escasa pirotecnia y sin que le revienten tantos ‘cuetes’, el goleador natural del lejano Urdaneta metió ayer un bombazo en el Alberto Gallardo que tuvo el efecto de una potente anestesia en los hinchas celestes.
Casi a los 90+2’, con el 1-0 a favor de los rimenses, Jairo Concha vio el espacio que dejaba la defensa rival y lanzó un pase largo para la última corrida de Escobar. El artillero -sumó 7 en el Clausura- vio al Patricio Álvarez retrocediendo y sacó un sablazo para tumbarse las ilusiones bajopontinas y gritar a viva voz que los ‘santos’ pelearán hasta el final por no bajar a la Liga 2.
El cuento del pudo ser
Si Sporting Cristal quería, ayer hubiera convertido todos los goles que le daba la gana. Su plantel, nombre por nombre, era superior a San Martín. Tenía a Cristian Palacios de atacante, a Christofer Gonzales y Fernando Pacheco por los extremos, y a Martín Távara, Horacio Calcaterra y Jorge Cazulo organizando el juego en el mediocampo. Hasta en la defensa jugaron los mejores del plantel. No le faltó ningún titular.
Entonces, ¿qué pasó? Sporting Cristal apretó el acelerador como lo hace un equipo que se siente superior en el campo. Se asoció para ganar, buscó el error del contrario y guardó fuerzas por si los embates de los jóvenes santos podía llevar peligro al área celeste. Dio la sensación, desde el arranque, que el equipo de Manuel Barreto tenía todo bajo control. En esa tranquilidad estuvo la desesperación para definir.
A los 11’, Távara buscó a Palacios y obligó a que el portero Diego Penny salga de su área a cometer una arriesgada falta que le pudo costar la expulsión, y claro, el partido a los albos. Luego, Pacheco probó dos veces hacia el arco contrario. La primera se fue desviado, y la segunda, encontró bien posicionado a Penny para impedir el primer gol.
Oslimg Mora, a los 44’, respondió para la escuadra local con un tiro que parecía se podía colar en el ángulo pero que encontró las manos seguras de Patricio Álvarez.
En la segunda etapa no cambió eldiscurso. Cristal intentó por todas las vías. Pateó Távara, cabeceó Sandoval, buscó Olivares (entró por el lesionado ‘Canchita’ Gonzales) y nada.
Recién a los 72’, en el enésimo centro de Johan Madrid al área de San Martín, llegó el gol. Es decir, el autogol. Porque el disparo de Madrid chocó en el botín de Vega, rebotó en la pierna de Marcos Delgado y se coló en el arco de Penny.
Listo, 1-0 en el marcador y Cristal quedaba a tiro de jugar con la desesperación de San Martín. Sin embargo, fueron los ‘santos’ los que no se bajaron del ring. Y antes de que suene la campana, golpearon con un golazo de Escobar. El grito de gol retumbó hasta Campo Mar.