La CONMEBOL anunció a través de sus medios oficiales que la nueva sede de la final de la Copa Libertadores se jugará en Lima. Ante los problemas que vienen ocurriendo en Chile, el ente presidido por Alejandro Domínguez confirmó que la capital peruana albergará el partido entre River Plate y Flamengo por el título de este torneo.
Alejandro Domínguez, presidente de CONMEBOL, reiteró esta información en una conferencia de prensa realizada en Asunción y se tomó un tiempo para agradecer a Martín Vizcarra por haberle dado las garantías para que este partido de Copa Libertadores se juegue en Lima.
"Agradezco a Martín Vizcarra por darnos las garantías para que la final de la Copa Libertadores se juegue el 23 de noviembre en Lima. Se están tomando todos los recaudos y, además, quiero adelantar que el sistema de devolución de dinero de todos aquellos que ya compraron entradas se está implementando. En poco tiempo las relanzaremos dándole la prioridad a aquellas personas que ya tuvieron la posiblidad de acceder a ellas", dijo.
Por otro lado, Alejandro Domínguez dio detalles de la reunión donde se decidió que Lima sea la sede de la final de la Copa Libertadores y aseguró que, si bien se llegó a un consenso, este no se dio de manera veloz.
"Hubo consenso, pero rápido no fue. Venimos trabajando sobre una ciudad hace más de un año y ahora tuvimos que encontrar la opción más viable. Entendemos que ambos clubes y presidentes están haciendo un esfuerzo para explicar la situación que nos ha llevado a tomar esta decisión", sentenció.