La puntería de Holgado fue suficiente para superar la ventaja de 2-0 que el equipo peruano logró en la ida y que aspiraba a hacer valer en este choque decisivo.
El Cusco trató de dormir el partido, pero al término de la primera mitad el conjunto itálico ya había logrado igualar la eliminatoria.
El primer tanto lo cocinó Jorge Henríquez desde el sector derecho, sacando un centro que Holgado remató de cabeza al vertical izquierdo del guardameta Juan Pretel, que nada pudo hacer para evitar el gol.
El segundo tuvo mejor factura aun: un pase por elevación de Diego Torres que Holgado engancha de volea para encajarla por el lado derecho del guardameta peruano.
Antes de este doblete, Holgado tuvo otras dos clara chances de gol que no cuajaron, una que se escapó rozando la portería y otra que Pretel atajó con una gran estirada en la base del poste izquierdo.
El Audax tuvo una ocasión más antes del intermedio en la cabeza de Henríquez, quien remató sin suerte en una especie de palomita que a la postre le costó una lesión en su rodilla derecha y fue sustituido.
El portero de los itálicos, José Devecchi, se impuso en el mano a mano a Janio Pósito y desbarató la ocasión más clara del Cusco en la primera mitad.
En la reanudación, el Cusco imprimió una fuerte presión y en pocos minutos tuvo tres ocasiones, con dos remates de Pósito y uno de Alfredo Ramúa, sin lograr anotar.
Poco después llegó el tercer tanto de Holgado, que a la postre valdría la clasificación: un remate de cabeza que se coló por el palo izquierdo tras aprovechar un centro al área de Nicolás Orellana.
En el tramo final, el colegiado anuló un gol de Marcos Delgado para el Cusco, por posición adelantada, y poco después el peruano Pósito perdonó el gol que podría haber dado la clasificación a su equipo con un cebezazo que se escapó por poco.
El asedio peruano fue constante hasta el final y el guardameta José Devecchi tuvo que intervenir para rechazar varios remates de Pósito y Franco Boló y certificar la clasificación del Audax.