Gonzalo Valencia @Gonza1504
Con 39 años, Ysrael Zúniga es referente, ídolo y hoy, parte de la historia de FBC Melgar de Arequipa, flamante campeón nacional tras 34 años. Es goleador y líder del cuadro rojinegro, sigue corriendo como si fuera un juvenil. Pero tiene una cualidad que lo resalta por encima de su amorío con la red: su sencillez.
Ama a FBC Melgar pero es consciente y generoso del hecho que ocupa un lugar en el corazón de cada arequipeño. Saluda, abraza, sonríe, regala besos, hace bromas, firma autógrafos y no duda en detenerse para atender a los que lo idolatran. “Yo no soy ídolo”, refuta y muestra de su grandeza. Aquí las palabras de uno de los gestores de la proeza del equipo rojinegro.
¿Cuáles son las virtudes de FBC Melgar campeón?
El trabajo planificado y organizado. La disciplina y el compromiso del grupo. El compromiso fue importante, de lo contrario no sería posible que el plantel se hiciera fuerte.
¿Qué significa FBC Melgar para ti?
Melgar es mi vida. Es el club que me ayudó a crecer profesionalmente. A mejorar como persona. Acá debuté como futbolista profesional. FBC Melgar tiene ahora el gran reto de la Copa Libertadores. Juan Reynoso nos dijo que no vamos a participar en la Libertadores, vamos a competir. Ese es el objetivo.
¿La rotación de Juan Reynoso fue un plus o en algún momento restó confianza en los jugadores?
Te quita confianza cuando no la tienes o cuando te sientes menos que el compañero. Yo he visto que cuando a los chicos les tocó jugar lo hicieron bien. El entrenador toma la decisión de armar un equipo titular y uno a veces no está, pero eso no significa que no te tomen en cuenta o que no puedas competir por el puesto. Juan Reynoso logró que su idea se entienda. Todos estuvieron en capacidad de jugar y ayudar.
Eres el jugador más experimentado del equipo ¿Cuál fue tu aporte?
Las ganas de seguir aprendiendo. Demostrar que se puede seguir compitiendo (a los 39 años) y aprendiendo de los demás. Ese fue mi aporte. Que vean en mí un jugador experimentado con ganas de seguir jugando, de mejorar día a día, de crecer y seguir aprendiendo. Fui un ejemplo, de lo contrario ellos no se entrenarían bien.
El planteamiento de Reynoso es criticado por algunos ¿Cuál es tu opinión?
Juan Reynoso es una persona ’10 puntos’. Es muy humano. Profesionalmente es exigente al máximo. Sé que seguirá creciendo cómo entrenador, como en los últimos años. Se capacita y estudia constantemente. Todo es un proceso. Pero Reynoso plantea los partidos para ganar. A veces hay que apretar y otras defender, eso depende del rival.
Reynoso aparenta ser una persona difícil ¿es el mismo en la interna?
Se nota que con la prensa y la gente que no conoce puede caer pesado, desde que lo miras. Pero cuando lo tratas y perteneces al grupo es una gran persona. A mí me marca de Juan su exigencia para trabajar. Nunca se conforma y es detallista. Lo más importante es que los jóvenes crezcan más allá de ganar o perder.
¿Cuál es el origen de tu sencillez, incluso después de ganar un título de ensueño?
Sé de dónde vengo, sé a dónde voy y lo que quiero lograr. Algún día me moriré y no me hace bien que el ego se me suba a la cabeza. La vida es corta y para disfrutarla.
¿A los 39 años como se asimila alcanzar la gloria?
Hasta ahora no lo creo. Me costó asimilarlo. Fue un camino de luchas y muy difícil. Para el partido llegamos con una carga y responsabilidad tremenda. Pero felizmente el resultado se dio.
¿Qué sigue en tu vida: retirarse o seguir en Melgar?
Primero disfrutar de la familia. Luego descansar después de un año muy duro. Esperaré lo que Dios tiene preparado para mí. Tengo ganas de seguir jugando en FBC Melgar. Siento que tengo las fuerzas como para competir por un puesto en el equipo.
¿Fuiste futbolista de casualidad verdad?
Yo estudiaba para ser técnico dental, con miras a ser odontólogo. Fui a ver a mi hermano jugar y me invitaron a participar. Yo no quería jugar. Me negué varias veces pero al final por insistencia acepté y mira donde estoy (risas). Jugué en el equipo de mi barrio en Real Madrid de Uchumayo, del distrito de El Cardo de Camaná, con ellos llegué hasta la finalísima de la Copa Perú. El Cardo es el barrio de los campeones: Julio Ernesto Granda Zúñiga, los hermanos Neyra (Genaro y Ernesto) los Valencia (Marco y Wilmar). Parece que es la tierra bendita, todos los que salieron de allí fueron campeones.
Ysrael Zúñiga jugó en Turquía (Bursaspor), Premier League (Coventry City), Cruz Azul (México), Juan Aurich, Sporting Cristal y Universitario de Deportes.