Se conocieron en Matute. Pero no en la popular sur a la que fueron infinidad de veces. Tampoco en un partido del primer equipo. La primera vez que se encontraron fue en la cancha auxiliar del estadio blanquiazul y en un partido del equipo femenino. Por curiosidad de ir a ver el fútbol femenino y por amor e identidad al club, cinco “tribuneros” -dícese del hincha que tiene en el estadio su templo al que asiste siempre- se juntaron sin saber que un 16 de agosto de 2019 formarían “La Banda Íntima”, la primera barra oficial de un equipo femenino en el Perú, y que estarían un sábado por la tarde, desde Sur, junto a otros cientos de hinchas, alentando y gritando cada uno de los once goles que le propinó Alianza Lima (11-1) a Atlético Trujillo por la Liga Femenina.
Llegó a costar 8 millones: la dura caída del valor de Paolo Guerrero en el mercado de fichajes