Hay jugadores de la selección peruana que son estrellas -gracias, Gallese-, pilares fundamentales no solo para este proceso de eliminatoria (la versión del segundo tiempo de Renato Tapia, por ejemplo) sino también de los anteriores (Guerrero, Carrillo, Advíncula, etc).
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Pero hay otros que son obreros, peones. Saben que el rol principal no es su fuerte, pero,si su labor secundaria destaca, también ganamos todos. Son más cómodos siendo actores de reparto que protagonistas. Pero son parte importante de la historia. Hoy, cuando nuestros estelares no estaban o fallaron, ellos dieron un paso adelante: Andy Polo, Marcos López, Wilder Cartagena o Aldo Corzo. Arrancando el partido, ingresando como pieza de recambio, recomponiendo el funcionamiento de un equipo que en el primer tiempo se había visto superado por la selección paraguaya. ¿Qué cambió en Perú para que el segundo tiempo sea tan distinto?
Quisiera ser parte del comando técnico o del staff de la FPF para saber qué le dijo Reynoso a sus jugadores en el entretiempo. Para entender qué cambió en el chip peruano para convencerse de que las divididas también se podían quedar con nosotros. O para descubrir como es que al picante extremo Ramón Sosa, esta vez, ya sin Advíncula, lo anularía el mil veces cuestionado Aldo Corzo.
O quizá escuchar cómo Marcos López, aún compartiendo el puesto con Trauco, iba a ser soporte de este y se repartiría, junto al nacido en la selva peruana, las funciones y el juego en toda la banda izquierda peruana.
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Cartagena entró a la primera línea de volantes y Tapia pasó a ser zaguero central, en el que fue el cambio táctico más importante de Reynoso en el duelo en Ciudad del Este. Si Wilder -con experiencia en tierras árabes (pasó por el fútbol de Qatar) y ahora en la MLS donde ya se enfrentó a Messi- cumplía, Perú ganaba oxígeno. Recuperaba balones más rápido, acompañaba mejor a Yotún y suplía las falencias perunaa en el medio del campo. Cartagena bien.
Andy Polo, que no gravitó mucho en ataque, aunque tuvo una más que interesante opción en el 1T para abrir el marcador, tuvo mucho más sacrificio táctico que posibilidad de desequilibrar. El lateral-volante de la U no desentonó y fue cambiado cumplidos los 90 minutos. Acierto de Juan Máximo.
Con varios jugadores estelares que hoy no están por distintas razones (Carrillo de discreto partido, Advíncula expulsado, Cueva y Flores fuera de la convocatoria), ¿será acaso que llegó el momento de los actores de reparto? Que ya es tiempo de ver más a los López, Cartagena, Abram, Polo y compañía. ¿Que los recién salidos de la academia del “séptimo arte” (nuestra querida Liga 1) Grimaldo, Quispe, o los D’Arrigo o Jostin Alarcón podrían pasar a ser opciones?
El martes la todopoderosa Brasil nos visita en el Estadio Nacional. Y aunque los números, la historia, los planteles y cualquier dato nos diga que no hay opciones, ¿no serán acaso los actores de reparto los que intentarán darle un nuevo giro a la película de las Eliminatorias?