Definición con polémica y sanciones: la razones para que haya una ‘extra game’ por el título de la Liga de Vóley [VIDEO]

Es un acto de fe. Una cuestión de creer. De saber que la grandeza está en saber levantarse para celebrar. Y es lo que mostró la Universidad San Martín no solo en la primera final de la Liga Nacional de Vóley, disputada la noche del viernes: lo ha probado en los últimos años para decirle al deporte peruano que las santas tienen su lugar ganado en la historia de la Liga con cinco títulos y que no será fácil quitarles ese rótulo.

Pero la tarde del domingo el que más creyó fue Alianza Lima. Y se impuso por 3-0 para forzar el extra game. Con una gran juego defensivo, con cada salvada de Esmeralda Sánchez, las blanquiazules controlaron a las albas para imponerse por 25-18, 25-22 y 25-22.

Así, le quitaron el invicto a la San Martín que se quedó en 23 partidos. El domingo 28 se definirá todo. Desde las 5:30 p.m. en el Polideportivo de Villa El Salvador se conocerá al campeón. No habrá mañana.

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LA PREVIA

Es la misma San Martín a la que en el 2021 se le fue casi todo el plantel por deudas y la que el 2022 descendió y jugó el Torneo Reclasificatorio para volver a primera. Sí, en cuatro años pasaron muchas cosas en los pasillos universitarios, pero nunca se rindieron. No dejaron de creer.

Palmarés de la LNSV

Regatas - 8

USMP - 5

Géminis - 3

Circolo - 2

UCV - 1

Divino Maestro - 1

*Con formato Liga, desde 2002

Y lo del viernes por la noche fue un reflejo de ese empuje. Tenían triple match point en contra luego de cuatro largos sets ante Alianza. Pero ahí estuvieron las santas para remontar y ganar la primera final por 3-2. Hoy, esta tarde, salen a disputar el partido que las puede consagrar por sexta vez en su historia.

La San Martín dominó la Liga de Vóley entre el 2013 y 2019 con cinco títulos en seis ediciones –y antes ya había jugado dos finales en el 2011-12 y 2012-13–. Hoy desde las 5:30 p.m., puede revivir otra jornada de gloria si vuelve a vencer a Alianza en la segunda final. Armas tiene, desde la potencia de cada mate de Fernanda Tomé, la solvencia de Eliana Pérez, el armado de Shiamara Almeida, los saltos de Brenda Lobatón y las salvadas de la líbero Pamela Cuya. Y con la garantía de no haber perdido ningún encuentro de los 23 que disputó.

SIGUE LA GRAN FINAL

“Si ganamos es por la fuerza del equipo, porque somos un equipo muy fuerte y cada una fue haciendo un poquito más”, destaca Fernanda Tomé, la máxima anotadora del equipo y la segunda del torneo -suma 427, solo por debajo de los 454 de Alondra Tapia de Géminis-. La brasileña además es la mejor receptora y las santas tienen a la mejor armadora del certamen, en Shiamara con 30.96% de eficiencia.

La mentalidad ganadora, la mentalidad fuerte ayudó para ganar el partido. Estamos contentas porque entrenamos muy fuertes para salir campeonas. Salimos con todo porque hay motivación y confianza con mis compañeras

Brenda Lobatón, jugadora de San Martín

Aunque la definición empezó ayer, luego de que la FPV sancionara con tres meses a los técnicos Vinicius Gamino (San Martín) y Rafael Petry (Alianza), además de un castigo para la asistente aliancista Martha Carrillo y una multa económica para ambos clubes, por los hechos de violencia tras el primer partido.

La sanción llegó para ambas instituciones porque los actos se dieron de ambos lados, luego de que el entrenador santo invadiera el campo blanquiazul al festejar la victoria final. El reglamento del torneo establece penas para cada uno de los actores de los hechos que ensuciaron el cierre del encuentro.

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Presión íntima

Alianza tiene tres peleas esta tarde: la lucha contra la San Martín, contra la presión y contra la mochila pesada que dice que no han ganado nunca desde que se juega la Liga (2002) y que su último título nacional data de 1993, en la recordada División Superior Nacional de Voleibol (Disunvol).

Y, sobre todo, se enfrenta a la frustración de haber llegado a las tres últimas finales y haberlas perdido –todas ante Regatas–. Un cuarto tropiezo sería un duro golpe en La Victoria que ha apostado por el vóley con un importante esfuerzo económico. Ese es el reto, ese el combustible.

Pudo ganar el viernes, pero desperdició los tres match point que tuvo a favor. Coraje le sobra, tiene buenas jugadoras en cada puesto –brillante Maeva Orlé en el ataque y es la mejor opuesto del torneo–, pero le está costando esa parte de la definición en momentos críticos. Quizás sea momento de apostar desde el inicio por su último refuerzo, la brasileña Mariana Brambilla, quien llegó ante la lesión de Sarah Cruz, y que también haga pesar esa enorme hinchada que lo apoya fecha a fecha.

Será un final como el deporte más querido del Perú se lo merece. El peso de toda la historia que tiene Alianza Lima, para forzar un tercer partido –que sería el domingo 28– o la fe de un cuadro hecho para ganar títulos de vóley como la San Martín, que nunca deja de creer.