En muchos países alrededor del mundo, puedes colocar el nombre del recién nacido junto al apellido de su madre y para alegría de muchos, en Perú también hay esa posibilidad. Desde la sentencia del Tribunal Constitucional en el 2021 se permitió que, bajo algunos parámetros, los padres de familia puedan elegir el orden de los apellidos de sus menores hijos.
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¿Cómo registro a mi recién nacido y que su primer apellido sea el materno?
La ley señala que, si ambos padres quieren inscribir al recién nacido con el apellido materno primero, deberán iniciar un proceso judicial.
"El artículo 29 del Código Civil establece que no se puede cambiar o añadir un nombre sin una justificación válida. Por ello, los padres deben presentar una demanda judicial, argumentando las razones por las cuales desean colocar el apellido materno en primer lugar. (…). El órgano judicial no puede basarse en criterios subjetivos, sino que debe evaluar el caso de manera objetiva", relató Mayda Mendoza, especialista en derecho de familia, infancia y adolescencia durante una entrevista para La República.
En caso que los progenitores no se pongan de acuerdo, la situación puede complicarse. Por su parte, la especialista menciona que en caso ocurra, existen proyectos de ley para resolver este conflicto: "Si los padres no concuerdan en el orden de los apellidos, se propone realizar un sorteo como método objetivo para determinar cuál apellido irá primero. Este sorteo sería supervisado por un registrador del Reniec y garantizaría que el proceso sea justo para ambas partes", indicó.
¿Si soy mayor de edad puedo colocar como mi primer apellido el materno?
Si tienes 18 años o más y quieres modificar el orden de tus apellidos debes presentar una justificación ante un tribunal para que autorice la modificación. Según la abogada: "El cambio de apellido para una persona mayor de edad solo puede realizarse a través de una demanda judicial, de acuerdo con el artículo 29 del Código Civil. Este artículo establece que no se puede modificar el nombre o el apellido sin una razón válida".
Entre las justificaciones por las que un adulto puede solicitar el cambio incluyen el abandono o la falta de relación que existe con el progenitor que dio el apellido, así como situaciones de violencia o desinterés durante la infancia, pero el Tribunal establecerá si esas razones son suficientes para que puedas cambiar tu apellido.