“El tiempo no pasa en vano”. Aquel famoso refrán se emplea para aceptar con tristeza los efectos del transcurrir de los años. Y aunque duela, hay que aceptarlo. Tal como ha empezado a hacer Lionel Messi. Con 36 años encima y guiñando el ojo al retiro, el genio de Rosario sabe que el cuerpo no es el mismo de antes, que ya no es un chiquillo y que necesita dosificar. Es por ese motivo que pidió su cambio en el partido que Argentina le ganó 1-0 a Ecuador, en el estadio de River Plate, por la primera fecha de las Eliminatorias al Mundial 2026.
Luego de marcar un golazo de tiro libre para el triunfo argentino, Messi reveló ante la prensa que pidió salir del campo y dejó un aviso que arrugó el corazón de sus seguidores: que se acostumbren a verlo ser sustituido porque empezará a ser una constante en el equipo de Lionel Scaloni. Así no le guste al técnico.