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A una semana del límite para traspasos, varios nombres importantes podrían encotnrarse con equipos nuevos
Estamos exactamente a una semana de que se cierre la ventana de traspasos en la NFL, lo que significa que es el último momento que tienen los equipos para sumar jugadores de alto impacto inmediato. Después de eso, solo queda la firma de agentes libres, donde rara vez hay elementos de primera línea disponible a estas alturas de la campaña.
En lo que va de la temporada regular, se han concretado siete canjes, incluyendo a un safety dos veces All-Pro de primer equipo, un especialista en devoluciones de Pro Bowl, y un esquinero de Pro Bowl que vuelve a su equipo original.
Después de siete jornadas, hay franquicias que, sin estar matemáticamente eliminados, ya empiezan a pensar en la campaña del 2024. Así de mal comenzaron el 2023. Por otro lado, hay equipos que sueñan con ganarlo todo, pero todavía acarrean uno o dos huecos visibles en la plantilla que les impiden ser considerados entre los favoritos.
No intentamos pronosticar cuáles canjes podrían acordarse antes de la fecha límite para traspasos, sino enumerar 10 movimientos que nos gustaría ver en los días siguientes, pensando en que ambos clubes involucrados pueden verse beneficiados:
Davante Adams, receptor abierto, Las Vegas Raiders
Seguro, los Raiders han manifestado públicamente que no hay intenciones de canjear a Adams, pero no sería la primera ocasión en que una directiva recula a la hora de negociar a un jugador (véase Giants con Odell Beckham Jr.). Adams es el mejor en toda la NFL a la hora de correr rutas, y aunque su velocidad punta está lejos de deslumbrar, ofrece un radio de atrapada enorme en todos los niveles del campo. Además, Adams está visiblemente frustrado con el paso de los Raiders y su papel dentro del club, y una de las razones principales por las que firmó con Las Vegas --la posibilidad de jugar nuevamente con su quarterback colegial, Derek Carr-- no existe más. Los Raiders necesitan una reconstrucción comprehensiva, y obtener una compensación significativa por Adams sería un buen primer paso. Encima de todo, a sus 30 años de edad, Adams no está para ser paciente con un proyecto a largo plazo.
Destino ideal: Kansas City Chiefs. Solo hay tres jugadores en la plantilla de los Chiefs con al menos 20 atrapadas en el año, y solo uno de ellos juega la posición de receptor abierto, el novato Rashee Rice, con 26. El arsenal a disposición de Patrick Mahomes no ha respondido del todo por fuera, y el quarterback estelar sigue dependiendo, a veces excesivamente, de lo que logra Travis Kelce en el centro del campo, o Isiah Pacheco saliendo del backfield. Sumar una amenaza perimetral podría elevar a los Chiefs a nuevas alturas, y desbloquear algunas fases de la ofensiva que hoy están en el olvido.
Jonathan Allen, tackle defensivo, Washington Commanders
Después de una derrota más para Washington, Allen se mostró franca y abiertamente frustrado con su club. Los Commanders necesitan pensar en un quarterback, y actualmente están lejos de las selecciones más altas de primera ronda. Desprenderse de Allen, un dos veces seleccionado al Pro Bowl, podría acercarlos más a un prospecto viable para quarterback franquicia.
Destino ideal: Dallas Cowboys. Hace tiempo que los Cowboys no cuentan con una presencia realmente dominante en el interior de la línea defensiva (¿La'Roi Glover hace dos décadas?). Emparejar a Allen con Micah Parsons, DeMarcus Lawrence y el resto podría ayudar a compensar por la ausencia de Leighton Vander Esch en el centro de la defensiva, y ayudaría a elevar la presión sobre los pasadores, sobre todo ahora que Dallas no cuenta con Trevon Diggs en la secundaria. Además, Allen es lo suficientemente versátil para arrancar desde varios puntos en la línea.
Denico Autry, ala defensiva, Tennessee Titans
El hombre más subvalorado de nuestra lista, Autry es uno de los hombres que trabajan más duro en la plantilla de Tennessee. Eso podría traducirse en un precio menos elevado, contando también con que tiene 33 años de edad, que otros nombres de nuestra lista. Los Titans ya tomaron el paso de desprenderse del safety Kevin Byard, y la venta de garage podría ampliarse a otros nombres. ¿Por qué no preguntar por Autry?
Destino ideal: Miami Dolphins. En Miami, Autry tomaría la posición de ala opuesta al estelar Christian Wilkins, jugando por dentro de los linebackers Jaelan Phillips y Bradley Chubb, y desde esa posición podría terminar por conjuntar un frente defensivo aterrador para los contrarios. Autry es eficiente presionando por el interior, pero también es sólido para fijar la orilla en contra de la carrera. Todos hablan de la ofensiva de los Dolphins, pero un poco de ayuda al otro lado no caería nada mal.
Budda Baker, safety, Arizona Cardinals
Los Cardinals no están lejos de la etiqueta de peor equipo de la NFL, con un montón de huecos en todas las secciones de la plantilla. Además, poseen dos turnos de primera ronda, y podrían gozar de tres, si encuentran al socio de canje idóneo en un potencial canje de Baker, quien apenas regresó a entrenar luego de aterrizar en la lista de reservas lesionados tras un problema de tendón de la corva acaecido en la Semana 2. El 2024 sería el último año del contrato actual para Baker, así que de todos modos Arizona se arriesga a perderlo pronto, pero sin una alta compensación.
Destino ideal: Detroit Lions. Los Lions están cerca del fondo de la NFL en pases de touchdown permitidos, y cerca de media tabla en muchas estadísticas de defensiva aérea más. En una liga predominantemente aérea, eso significa que Detroit sufrirá en postemporada cuando se enfrente a equipos con ataques por aire superiores. Baker no es el safety de mayor rango, pero sí es capaz de producir jugadas grandes, cerca y no tan cerca de la línea de golpeo. Además, es un duro golpeador que le imprime un sello de violencia a la identidad de una unidad defensiva.
Saquon Barkley, corredor, New York Giants
Barkley comentó recientemente que no tiene planes de pedir su salida de los Giants pronto, pero el equipo no ha mostrado el mismo grado de compromiso con su mejor jugador ofensivo. Hay instancias en que toda la ofensiva de los neoyorquinos se reduce a lo que puede hacer Barkley, con todo y que carga con un historial de lesiones largo. Lo cierto es que Barkley es un arma dinámica capaz de hacerse pesar en varias fases del juego.
Destino ideal: Buffalo Bills. La ventana para campeonato parece cerrarse para los Bills, quienes siguen sin encontrar a un jugador confiable para su backfield. Barkley no debe ser considerado un reemplazo a lo que aporta el quarterback Josh Allen, sino lo que aporta Allen debe considerarse un complemento a lo que puede dar Barkley en esa ofensiva. Sumar a Barkley multiplicaría las jaquecas para las defensivas que enfrenten a los Bills, abriendo muchas oportunidades para que Allen se luzca.
Brian Burns, ala defensiva, Carolina Panthers
La joyita de la defensiva en la plantilla de los Panthers, Carolina ha sido una de las más grandes decepciones de la campaña, y no sería malo pensar en una reconstrucción a largo plazo. Burns es su activo más valioso, y puede generar un par de selecciones de primera ronda que ayude en ese proceso. A sus 25 años de edad, y con dos selecciones de Pro Bowl en los dos últimos años, la flecha de Burns apunta hacia arriba.
Destino ideal: Baltimore Ravens. Actualmente, los veteranos nómadas Jadeveon Clowney y Kyle Van Noy son los encargados de presionar a los quarterbacks por fuera para los Ravens. Aunque ambos elementos son medianamente confiables, no generan grandes jugadas explosivas para Baltimore. Sumar una presencia joven con futuro a largo plazo para construir junto a los linebackers Roquan Smith y Patrick Queen, Burns podría elevar a los Ravens al menos un escalón más hacia la consecución de un título.
Austin Ekeler, corredor, Los Angeles Chargers
Otro de los corredores que no ha recibido una muestra firme de respaldo por parte de su organización, Ekeler es inesperadamente productivo, tanto por aire como por tierra. Los Chargers han sido profundamente decepcionantes en el 2023, y está claro que apuestan más a atacar por aire que por tierra. Es tiempo en Los Angeles de liberar a Ekeler y dejarlo probarse con otros colores.
Destino ideal: Pittsburgh Steelers. Los Steelers nunca van a renunciar a insistir por tierra. Es parte de su ADN. Sin embargo, Najee Harris no ha podido solo con la carga en el pasado reciente, con un promedio de yardas por acarreo dolorosamente bajo. Ekeler podría sumar una nueva dimensión completando el juego terrestre con lo que aporta por aire, y siempre tendrá gran olfato para encontrar los puntos. Además, no debe ser una transacción elevada en precio.
Justin Fields, quarterback, Chicago Bears
El proyecto del gerente general Ryan Poles ha sido una miseria, y los Bears están desperdiciando tiempo de desarrollo de Fields. El brillante pasador de los Bears tiene pocas opciones de protección y pocas armas a su disposición, y una renovación total del proyecto tardaría demasiado tiempo. Es mejor para Chicago edificar la plantilla en el resto de las posiciones, y luego colocar a un quarterback nuevo cuando haya algún tipo de respaldo.
Destino ideal: Minnesota Vikings. Los rumores son fuertes de que Cousins está en su última temporada con Minnesota, y Fields podría aprender mucho de Cousins con media campaña en la banca, adquiriendo conocimientos sobre cómo entrenar, cómo dirigir a un equipo desde la reunión, cómo estudiar el libro de jugadas, y todo lo demás que no tuvo en Chicago. Fields todavía tienen un futuro salvable, pero necesita dejar de seguir adquiriendo malos hábitos generados por mala dirección. La llegada de Fields, además, podría ser lo necesario para convencer a Justin Jefferson de quedarse a largo plazo con los Vikes.
Matthew Judon, linebacker externo, New England Patriots
La defensiva de los Patriots solía ser motivo de orgullo. Hoy sigue siendo lo mejor de la plantilla, pero está lejos de sus mejores años. Judon es una de las piezas realmente valiosas en la unidad, y ha crecido enormidades desde que llegó a New England procedente de Baltimore. Ahora, es tiempo de explotar esas nuevas habilidades en un equipo con presencia de postemporada.
Destino ideal: Jacksonville Jaguars. Los Jags fallaron con Travon Walker, no hay por qué esconderlo. El primer recluta global del draft del año pasado simplemente no ha entregado una producción consecuente con sus expectativas. Judon mejoraría de inmediato a la unidad, haciendo dupla con un Josh Allen que se ha destapado recientemente, y devolvería a los Jaguars una defensiva de respeto como la que los llevó por última vez a los playoffs.
Courtland Sutton, receptor abierto, Denver Broncos
Los Broncos están en picada, y los rumores son fuertes de que van a desprenderse del quarterback Russell Wilson, incluso si eso significa tragar un montón de dinero muerto en el proceso. Wilson podría no ser el único de salida. Sutton es un genuino receptor N° 1 en la NFL con pocas oportunidades de demostrarlo en su actual situación.
Destino ideal: San Francisco 49ers. Deebo Samuel es un arma híbrida, y no sé si estoy listo para designar a Brandon Aiyuk como un N° 1. Sutton sería inmediatamente el mejor receptor abierto puro para los Niners, capaz de estirar el campo perimetralmente con consistencia, y abrir espacios por debajo para Christian McCaffrey y George Kittle. Una amenaza profunda con velocidad y capaz de ganar balones divididos haría de los Niners una fuerza realmente temible en todas sus líneas.