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América prácticamente sentenció la serie de Cuartos de Final de la Concachampions ante el New England Revolution que le facilita la preparación para una intensa carga de trabajo.
Al América sólo le inquietaron la lluvia y el frío. El mejor equipo de la Liga MX aplastó al peor equipo de la MLS, el New England Revolution.
El epitafio, un 4-0 en el juego de ida y, seguramente, el veredicto de la serie, aunque el diagnóstico era similar cuando el América goleó a Chivas (0-3), pero debió cargar con la derrota en su propio Nido, el Estadio Azteca.
Parecía inevitable desde la previa del partido: el líder de la Liga MX sólo debía confirmar el apelativo del escándalo ante el apagado Revolution, convertido en la escoria del torneo emelesero como sotanero con un punto de 15 posibles.
Cierto, como en la liga, también en esta Concachampions, Luis Angel Malagon deja su huella: tres atajadas espectaculares en los momentos en que el América se relajó y en momentos en que, otra vez, la defensa aguilucha es vencida en el juego aéreo.
América pudo cocinar la última cena del New England, pero erró en remates de Javairo, Richard Sánchez y Kevin Álvarez, quien desde que llegó al América, ha sufrido un acto de posesión demoniaca al usurparlo el espíritu errático y errante de Jurgen Damm en labores ofensivas: todos sus centros al área son un desastre y, encima, defiende mal.
Tras ponerle el yugo de manera absoluta a su parodia de rival en el primer tiempo, para la segunda parte, el América decidió administrarse para la visita a Santos el próximo sábado y cuidar las piernas para la visita del New England y después enfrentar a Toluca.
André Jardine tiene ya la cartografía perfectamente organizada para estos nueve juegos calendarizados para el América en el mes de abril (incluidos dos de Semifinales en Concachampions), lapso en el que puede campear en la Concacaf y mantener el liderato de la Liga MX para bi-campeonar.
La salida de Cabecita Rodríguez no ha dejado secuelas en El Nido y el haber recuperado a plenitud a sus jugadores con lesiones le permite cerrar el torneo mexicano con sus mejores armas y, además, sin distracciones de selecciones nacionales.
Por otro lado, ante un adversario más complejo, tercero en la tabla de la MLS, como lo es el Columbus Crew, Tigres sacó el empate a uno que resulta un buen negocio, dado que, para la vuelta, el adversario no contará con dos jugadores clave como Jordan Morris, expulsado este martes por la noche, y seguramente se mantendrá la sanción interna sobre el colombiano Cucho Hernández, quien tiene ya un largo historial de indisciplinas en todos los equipos en los que ha militado.
Para Tigres, el panorama no es generoso: recibe a Pachuca y tras la vuelta ante Columbus, tendrá el Clásico Regio ante Rayados, que este miércoles enfrenta al Inter Miami dentro de esta Concachampions que cierra la Ida de Cuartos de Final con la visita de los Tuzos al Herediano de Costa Rica.