Cuando Alexander Callens fichó por el Girona a comienzos de la temporada 2022-23, tuvo la esperanza de volver por todo lo alto al fútbol europeo después de haber jugado durante seis años con el New York City en la MLS. Sin embargo, no todo salió como esperaba y para el curso 2023-24 tuvo que marcharse prestado al AEK Atenas. Así pues, tras un año en la Superliga de Grecia, el elenco helvético quedó satisfecho con su rendimiento y decidió ficharlo hasta junio del 2026.
Con un nuevo contrato por dos temporadas, el zaguero nacional contará con la continuidad que tanto estaba buscando y no pudo conseguir en el Girona, no solo por decisiones técnicas, sino también porque padeció algunas lesiones que no le permitieron mostrarse al 100 %. Ahora todo eso es cosa del pasado y, mientras está enfocado en la Copa América con la Selección Peruana, luego podrá pensar en seguir ‘rompiéndola’ en el balompié griego.