Para muchos de nosotros, cocinar una ave de gran tamaño, como el pavo, puede ser una tarea intimidante. ¿Cómo descongelarlo correctamente? ¿Cuál es la mejor forma de sazonarlo? ¿Qué pasa si queda seco o, por el contrario, crudo? Y si eres de los que nunca han asado un pollo entero y ahora te toca preparar el pavo para la cena de Acción de Gracias, la presión es aún mayor. Por eso, te compartimos nuevamente valiosos consejos de los expertos culinarios Marisoll Hernández, José Santaella y Maira Isabel, quienes te explican cómo lograr un pavo perfecto.
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Evita estos errores al cocinar el pavo
- Descongelar el pavo a temperatura ambiente: La chef Marisoll aclara que después de sacar el pavo del congelador, debe colocarse en el refrigerador, lo cual puede tomar entre tres y cuatro días, dependiendo de su tamaño. En general, se recomienda dejarlo en el frigorífico un día por cada cuatro libras. Si aún no lo has comenzado a descongelar, ya es tarde.
- Hacerle cortes al pavo: El chef Santaella señala que esta práctica no es recomendable, ya que hace que el pavo pierda sus jugos naturales y se reseque.
- Olvidar los ingredientes necesarios: El estrés y la falta de planificación pueden llevar a olvidar algunos ingredientes importantes, lo que hace que se improvise al momento de sazonar el pavo o preparar las salsas.
- No marinarlo o condimentarlo con suficiente tiempo: La chef Marisoll Hernández enfatiza que el pavo debe marinarse o sazonarse entre uno o dos días antes de cocinarlo. Si no se hace con antelación, el resultado será un pavo seco y sin sabor. Este es el momento clave para hacerlo.
- No usar salsa: La salsa es fundamental para darle el toque final al pavo, agregando sabor y ayudando a que quede más jugoso.
- No emplear varias grasas: La chef Maira Isabel recomienda usar diferentes tipos de grasas, como tocino, aceite de oliva o mantequilla, para asegurar que el pavo quede jugoso.
- Dejar el pavo demasiado tiempo en el horno: Esto puede resultar en un pavo seco. El tiempo de cocción varía según el tamaño del ave y la calibración del horno, pero en general, un pavo de 10 a 12 libras se cocina en tres o cuatro horas a temperaturas entre 350 °F y 400 °F.
- Cortar el pavo de inmediato al sacarlo del horno: Tras sacar el pavo del horno, los jugos permanecen en la carne. Es importante dejarlo reposar entre 15 y 30 minutos para que conserve sus jugos.
- Dejar que el pavo se queme: El chef Santaella advierte que las alas del pavo suelen cocerse más rápido, y si no se cubren con papel aluminio o se amarran, pueden quemarse fácilmente.
- No verificar la temperatura del pavo mientras se hornea: La chef Maira Isabel explica que es esencial usar un termómetro para asegurarse de que el pavo se cocina correctamente. Este debe insertarse en la parte más gruesa del ave para verificar que alcance los 165 °F.
Para adobarlo
Una forma de sazonar el pavo para que quede muy jugoso es sumergirlo en una salmuera. Esta solución, que mezcla diversas especias y condimentos con líquidos, permite que la carne absorba todos los sabores al dejarla reposar durante varias horas.
Para ello, la chef Marisoll comparte:
• Selecciona un recipiente lo suficientemente grande para colocar el pavo y añadir dos galones de agua, disolviendo en ella dos tazas de sal.
• Coloca el pavo en el recipiente y refrigéralo durante 24 horas.
• Después de ese tiempo, retira el pavo, sécalo con toallas de papel.
• Ahora, sazónalo mezclando romero y tomillo con aceite (preferiblemente de oliva), ajo y sal. Aplica esta mezcla por fuera del pavo, pero también es importante introducirla en su interior y debajo de la piel.
El pavo paso a paso
La chef Marisoll nos ofrece una guía básica para preparar el pavo. Recuerda que antes de comenzar este proceso, debes haberlo sazonado de uno a dos días antes de hornearlo.
- Precalienta el horno a 350° F.
- Cubre el pavo con mantequilla, tanto por dentro como por fuera.
- Colócalo en la bandeja de hornear. Asegúrate de atar las patas con un cordón y de doblar las puntas de las alas debajo del cuerpo del ave para evitar que se quemen.
- Después de una hora, retíralo y recoge el jugo grasoso que ha soltado, colócalo en una taza, y distribúyelo uniformemente sobre el pavo.
- Vuelve a meter el pavo en el horno.
- Repite este proceso cada 20 minutos, asegurándote de hacerlo rápidamente para que el pavo no se enfríe.
- Retira el pavo y verifica si está completamente cocido. Para hacerlo, corta entre la pierna y la pechuga; si está listo, no verás sangre. Si aún queda sangre, devuélvelo al horno por unos minutos más.
- Una vez cocido, deja reposar el pavo durante 10 minutos.
Ten en cuenta al momento de hacer las compras que cada persona consumirá aproximadamente una libra de pavo. De esta manera, te aseguras de que habrá suficiente para tus invitados.