El sueño europeo llega a su fin... al menos por el momento. Este domingo Hirving Lozano tuvo su último partido en el futbol del Viejo Continente en la victoria del PSV Eindhoven ante el Feyenoord en la fecha 17 de la Eredivisie.
Lozano entró los últimos instantes del encuentro para que recibiera la ovación del público, quienes lo consideran un ídolo tras conquistar dos campeonatos de liga.
Terror en Países Bajos
Cerca de cumplir 22 años, Lozano abandonó Pachuca para vivir el sueño de muchos futbolistas: jugar en las mejores ligas del mundo. Aunque la Eredivise no entra entre los torneos top de Europa, sería un primer paso para alcanzar el objetivo.
En especial porque la Liga MX ya le quedaba chica para sus pretensiones. El Chucky se convirtió en uno de los futbolistas clave del campeonato del Clausura 2016 y de la Concachampions. En su último torneo en México jugó 29 encuentros y marcó 10 goles.
Según Transfermarkt, el PSV desembolsó 12.5 millones de euros por Lozano, precio que logró desquitar en su primera temporada al coronarse campeón de la Eredivisie y marcar 17 goles en 29 encuentros; además de que en Champions hizo cuatro anotaciones en ocho encuentros.
Para la siguiente temporada las estadísticas fueron parecidas: 17 dianas y 11 asistencias en 30 encuentros, aunque ahora no hubo ni títuló ni participación en Champions.
Estos números llamaron la atención de Carlo Ancelotti, uno de los técnicos con más títulos en la historia. El italiano tomó el mando del Napoli después de Maurizio Zarri, por lo que se fijó en el joven mexicano para reforzar la ofensiva.
De la gloria a la sequía
Para la temporada 2019-2020, Lozano llegó a Napoli con cartel de estrella: los 45 millones que gastó la escuadra italiana lo convirtió en su fichaje más caro, por lo que se esperaba que fuera fundamental en la búsqueda del título.
Ancelotti le dio la confianza de disputar 26 encuentros de Serie A y de disputar siete encuentros en la Champions League, pero solo marcó cinco goles y brindó una aistencia en una liga que prioriza el trabajo defensivo. Eso sí, ganó la Copa Italia en su primer año.
Al año siguiente las estadísticas mejoraron al marcar 11 goles en la liga local en 32 encuentros; tres goles en cuatro duelos de Copa Italia, y un tanto en seis duelos de la Europa League. Y esta misma tónica siguió en los siguientes dos años: rebasó la barrera de los 30 juegos, pero apenas marcando seis goles en 21-22 y cuatro en la 22-23.
Nueva aventura
Lozano pasó sin pena ni gloria en la Serie A, por lo que el PSV decidió regresarlo para la temporada 2023-2024. En este año jugó 31 duelos anotó, entre Eredivisie y Champions, y marcó en seis ocasiones.
Aunque regresó a Países Bajos con bombo y platillo, el PSV encontró un buen negocio en la MLS para recuperar lo invertido en el mexicano. San Diego FC pagó 12 millones para llevar al Chucky a Estadoa Unidos, pero el traspaso se haría hasta diciembre.
Con la certeza de que se iría de Eindhoven, Lozano cerró su participación en Europa de la mejor maneta posible: cuatro goles en 11 encuentros.
Y si bien una lesión lo alejó de las canchas por unas semanas, el canterano del Pachuca llega a Estados Unidos siguiendo los pasos de Héctor Herrera, Carlos Vela y Chicharito, mexicanos que prefirieron abandonar Europa por los proyectos ambiciosos de la MLS.
RGS