Las ciudades santuario en Estados Unidos han sido un refugio para los inmigrantes indocumentados, ofreciendo protección contra las políticas migratorias federales. Sin embargo, la presión política y los recortes presupuestarios están llevando a algunas de ellas a replantear su postura, generando incertidumbre en sus comunidades.
En esta nota te contamos qué distrito dejará de utilizar el término 'ciudad santuario' por temor a enfrentar problemas administrativos y amenazas por parte del gobierno de Donald Trump.

PUEDES VER: ¿ICE y la administración de Donald Trump podrán controlar la inmigración ilegal? Esto dicen las encuestas
La decisión de este distrito por dejar de ser ciudad santuario
El Distrito de Columbia, conocido también como Washington DC, ha sido un espacio de acogida para inmigrantes. No obstante, ha dado un giro en su política. La alcaldesa Muriel Bowser ha decidido retirar el término 'ciudad santuario' del discurso oficial, argumentando que su uso es engañoso.
Según El País, esta decisión se reflejó en la eliminación de una página gubernamental que reafirmaba el estatus del distrito como santuario. Bowser, quien en 2020 logró consolidar a DC como una ciudad santuario mediante una ley, ahora adopta una postura más cautelosa.
En una reciente conferencia de prensa, explicó que el término 'ciudad santuario' sugiere que es posible eludir las leyes migratorias sin consecuencias, lo que no es realista dado el poder del gobierno federal en esta materia.
Donald Trump arremete contra las ciudades santuario
El actual mandatario, Donald Trump, ha sido un férreo opositor de las ciudades santuario, considerándolas un obstáculo para sus políticas migratorias. Durante su administración, amenazó con retirar fondos federales a aquellas jurisdicciones que no colaboraran con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en la detención y deportación de inmigrantes indocumentados.
El País señala que las presiones del gobierno federal han sido constantes. Desde su regreso al poder, Trump ha endurecido su postura, promoviendo demandas contra ciudades como Nueva York y Chicago por obstaculizar su estrategia antiinmigración.
Para él, la mejor manera de ejecutar deportaciones es contar con la cooperación de las autoridades locales, permitiendo que ICE actúe en cárceles y detenga a inmigrantes con antecedentes, incluso si solo han cometido faltas menores.
El futuro del distrito de Columbia y las políticas migratorias
El cambio de postura de Bowser también responde a la amenaza de recortes presupuestarios impulsados por la administración republicana. Con un Congreso mayoritariamente alineado con Trump, DC enfrenta la posibilidad de perder mil millones de dólares en financiamiento, lo que afectaría programas clave en educación, salud y seguridad para la comunidad migrante.
Además, la capital del país no tiene representación con voto en el Congreso, lo que la hace aún más vulnerable a las decisiones del gobierno federal. Algunos legisladores, como Jamie Raskin de Maryland, han sugerido que DC podría reincorporarse a su estado de origen para protegerse de las medidas impuestas desde Washington. Sin embargo, esta opción parece poco viable debido a la resistencia de los residentes de Maryland.
Mientras tanto, Bowser trata de mantener el equilibrio entre su autoridad y los fondos que necesita la ciudad. Según Abel Núñez, director de CARECEN, una organización de apoyo a migrantes, lo importante no es la etiqueta de "ciudad santuario", sino garantizar que existan recursos para la comunidad.
“Para algunos el término tiene un significado simbólico, pero en este momento, lo que realmente importa es la seguridad y estabilidad de los inmigrantes en DC”, concluye Núñez.