El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) está en el centro de una polémica tras la detención de 48 inmigrantes en Nuevo México a principios de marzo. Organizaciones defensoras de los derechos humanos han denunciado que el paradero de estas personas es desconocido, lo que ha generado una ola de indignación.
Según El País, la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) ha señalado que estos inmigrantes deben considerarse “desaparecidos”, ya que no se ha proporcionado información sobre su identidad ni sobre quién los tiene bajo custodia. En esta nota te comentamos cómo se pronunció ACLU ante este acto que atenta contra la comunidad inmigrante.

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La denuncia a ICE por la desaparición de los inmigrantes
La ACLU ha calificado la situación como una violación grave de los derechos humanos y ha exigido respuestas. Rebecca Sheff, abogada de la organización en Nuevo México, advirtió que la falta de información deja a los detenidos sin protección legal y sumerge a sus familias en una incertidumbre insoportable.
“Las desapariciones forzadas están prohibidas tanto por nuestra Constitución como por el derecho internacional”, afirmó Sheff. Ante el escándalo, la ACLU ha presentado una protesta formal ante el Departamento de Seguridad Nacional, sumándose a la denuncia otras organizaciones como New Mexico Immigrant Law Center y Somos Un Pueblo Unido.
El arresto de 48 inmigrantes en Estados Unidos
Según ICE, 20 de los detenidos tenían antecedentes por delitos graves, entre ellos homicidio y agresión sexual, pero también por infracciones menores como conducir bajo la influencia del alcohol o hurto en tiendas, delitos que anteriormente no eran motivo de deportación. Sin embargo, bajo la nueva ley Laken Riley, firmada por Trump, cualquier migrante indocumentado puede ser expulsado por estas faltas.
Los otros 28 arrestados fueron detenidos únicamente por haber ingresado ilegalmente a EE.UU. La operación, llevada a cabo en Albuquerque, Santa Fe y Roswell, contó con la participación de varias agencias federales, incluyendo la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y el FBI.
La situación migratoria de Estados Unidos
El caso de los 48 inmigrantes desaparecidos se da en un contexto de endurecimiento de las políticas migratorias en EE.UU. La Administración Trump ha reactivado la detención de familias, incluidos niños, en centros privados manejados por empresas como CoreCivic y GEO Group. Además, el gobierno ha invocado la ley de Enemigos Extranjeros de 1798 para deportar a cientos de venezolanos a El Salvador bajo la acusación de pertenecer a la pandilla Tren de Aragua.
La falta de transparencia en estos operativos ha generado un clima de temor entre la comunidad migrante. Mientras tanto, el director de CoreCivic, Damon Hininger, ha celebrado el crecimiento de su empresa debido a las nuevas medidas migratorias, calificando este momento como “uno de los más emocionantes” de su carrera.
La desaparición de 48 inmigrantes bajo custodia de ICE ha encendido las alarmas sobre la falta de transparencia y el trato que reciben los detenidos en EE.UU. Activistas y defensores de derechos humanos exigen respuestas, mientras el país se sumerge en un debate cada vez más tenso sobre su política migratoria.