Pese al segundo tanto de Mohamed Salah en el Mundial y a un récord impuesto por su arquero, Egipto no pudo preservar la ventaja inicial, y sucumbió 2-1 su encuentro de este lunes ante Arabia Saudita.
En un partido entre dos equipos ya eliminados, el primer tanto llegó a los 22 minutos, derivado de un balón perdido por los saudíes detrás de su medio campo. Tarek Hamed envió un pase adelantado y larguísimo hacia el astro de Liverpool, quien persiguió el balón y definió de manera magistral, picando el balón ante la salida del arquero Yasser Almoisalem.
El otro portero, el egipcio Essam El Hadary, impuso un récord como el jugador de mayor edad en participar en un encuentro mundialista, a los 45 años y 161 días. El Hadary tiene más edad que los técnicos de tres selecciones distintas que compiten en Rusia. La marca anterior pertenecía al colombiano Farid Mondragón, quien tenía 43 años cuando enfrentó a Japón en Brasil 2014.
Y su participación no fue sólo simbólica. Preservó la ventaja de su selección a los 41 minutos, cuando atajó un penal ejecutado por Fahad Al-Mullawad.
No pudo repetir la proeza. Un nuevo penal, en los descuentos y convalidado por el videoarbitraje, fue convertido por Salman Al Faraj.
Cuando el partido estaba por finalizar, en el cuarto y último minuto de tiempo añadido, Salem Aldawsari concretó el definitivo 2-1 sin tiempo para nada más.
Ninguno de estos equipos tenía posibilidades de avanzar a octavos de final, en un grupo donde Uruguay clasificó como líder tras vencer a Rusia, que también pasó a octavos de final. (D)