El trabajo interdisciplinario hoy es fundamental para todos los futbolistas que disputaron el Mundial Rusia 2018 . De acuerdo a Flor Zuzunaga, docente de Terapia Física de la Universidad Tecnológica del Perú (UTP), los jugadores de la Selección Peruana deben aplicar al menos cinco puntos para retomar en el mejor estado los entrenamientos y partidos de sus campeonatos.
1. Terapia física. Hoy es imprescindible en la recuperación de un deportista. En general, el cuerpo de los futbolistas se encuentra en un constante aumento de activación a través del sistema nervioso que altera el estado del sistema músculo esquelético y genera un mayor gasto energético, muchas veces provocando una fatiga muscular precoz. Por ello, los terapeutas físicos deben ayudar a regular y recuperar el estado físico de estos deportistas con diferentes técnicas y herramientas, como la descarga muscular o el ice bath.
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2. Apoyo psicológico. No solo importa el factor físico para un futbolista, el psicológico también cumple un rol importante en la recuperación posterior a una competencia tan intensa como el Mundial. Esta es una labor propia del psicólogo deportivo, quien debe trabajar en la presión que puede sentir un futbolista, haya o no logrado los objetivos propuestos. Ello es imprescindible porque la parte emocional se ve reflejada en el estado corporal influyendo directamente en una buena, regular o mala recuperación.
3. Hidratación. El calor que se vive en un partido de fútbol es un factor al que los deportistas están siempre expuestos, por lo tanto la hidratación es un componente que proporciona buena recuperación. Cada futbolista puede llegar a sudar entre uno o dos litros en un partido, generando una disminución de la percepción del esfuerzo, un aumento de la frecuencia cardiaca y un pobre trabajo de las capacidades funcionales, como la fuerza, resistencia, potencia y elasticidad. Para ello, los nutricionistas deportivos deben brindar una asesoría a través de evaluaciones e indicaciones sobre la cantidad de líquido que deben beber para una buena recuperación después de una competencia.
4. Alimentación. Debe ser equilibrada de acuerdo a las exigencias propias de la disciplina y los requerimientos necesarios para cada deportista. Si los futbolistas no cumplen un régimen alimenticio adecuado, pueden tener demoras en una pronta recuperación y, peor aún, estar predispuestos a sufrir lesiones músculo esqueléticas.
5. Descanso. El cuerpo médico recomienda dormir no menos de ocho horas al día, teniendo en cuenta el jet lag, o síndrome del cambio de horario, y el reloj biológico del jugador. El sueño y el descanso del deportista son una parte más de su entrenamiento, por lo que no trabajar en ellos aumenta el riesgo de producirse una lesión. Así, ambos son fundamentales en la recuperación post competencia y en el desempeño deportivo del día a día.