Una de las grandes promesas del circuito, la polaca Iga Swiatek (54ª WTA), de 19 años, fue un obstáculo demasiado alto para la argentina Nadia Podoroska (131ª), que cayó por 6-2 y 6-1 este jueves en semifinales de Roland Garros, a donde había llegado procedente de la clasificación.
Podoroska no pudo romper el techo de cristal del tenis femenino argentino en Roland Garros y se queda en la lista de jugadoras que alcanzaron las semifinales: Raquel Giscafré (1974), la leyenda Gabriela Sabatini (1985, 1987, 1988, 1991 y 1992), Clarisa Fernández (2002) y Paola Suárez (2004).
La última presencia argentina en una final de Grand Slam femenino se remonta a 1991 con la derrota de Sabatini en Wimbledon ante Steffi Graf.
Podoroska, de 23 años, llegó a semifinales desde la clasificación, por lo que se va de París con ocho victorias.
Swiatek, establecida en la primera línea de candidatas a estrella de la WTA, exhibió potencia y serenidad, en la que también era la primera semifinal de su carrera en un Grand Slam.
La jugadora rosarina había empezado ganando los dos primeros puntos del partido al resto y parecía que su tenis alegre, con variedad de golpes y mucha movilidad, podía tener opción.
Pero Swiatek cortó por lo sano, con un primer 'break' que le sirvió para situarse 3-0 tras 11 minutos. Su autopista hacia el triunfo casi no encontró baches y guardó energías para su otra semifinal, la de dobles, cerrando el partido en una hora y 10 minutos.
Ahora la polaca espera rival en la final del sábado. Se juegan el billete este viernes la estadounidense Sofia Kenin (6ª) y la checa Petra Kvitova (11ª). AFP