Por tercer megaevento consecutivo, la escena se vuelve a repetir. Angélica Espinoza desborda de emoción y la bandera peruana la acompaña. Corre de pura felicidad. La peruana logró la medalla de oro en parataekwondo y logró el bicampeonato parapanamericano de la división K44 47kg, además de ser la campeona paralímpica con su título en Tokio 2020.
MIRA: Por más Grimaldos y menos Carrillos: ¿qué se puede rescatar del proceso Reynoso en estas Eliminatorias?
Es la gloria que le regala Angélica al perú. Debido a su ránking, sexta en el mundo, la peruana inició su competencia en semifinales y ahí arrasó con la brasileña Tereshinha Correia por 22-6. Mientras, en la final le bastaron cinco contundentes patadas para superar por 10-4 a la mexicana Claudia Romero, la actual número 2 del ránking mundial.
Así, Angélica cumple con la esperanza dorada que pesaba sobra sus espaldas. La peruana, tímida y de pocas palabras, pero de mucha acción y aguerrida sobre el tatami, logra así su segundo oro paranamericano, la decimoquinta presea dorada en la historia para la delegación nacional.
Y con el éxito aún fresco, Angélica ya piensa en lo que viene. En diciembre viajará a Manchester para disputar un Grand Prix donde buscará asegurar su clasificación directa a París 2024.
Ver noticia en El Comercio: DT