Angelique Kerber, número uno del mundo y defensora del título, cayó por 6-2 y 6-3, ante la estadunidense Coco Vandeweghe y se jugará la española Garbiñe Muguruza en los cuartos de final del Abierto de Australia.
La derrota de Kerber abre las posibilidades de que la estadunidense Serena Williams recupere el puesto de número uno del mundo, algo que lograría con conseguir el título por séptima vez.
Hasta este domingo, Vandeweghe solo había estado una vez en los cuartos de un Grand Slam, en Wimbledon hace dos años, pero la neoyorquina de 1.85 metros repetirá esta ronda en sus primeros cuartos en Melbourne, tras vencer a Kerber, su verdugo en los dos precedentes anteriores.
Nieta del jugador de baloncesto de la NBA Ernie Vandeweghe y de Colleen Kay Hutchins (Miss América 1952), hija de la nadadora olímpica Tauna Vandeweghe, y sobrina del jugador de baloncesto de la NBA y dos veces integrante del All-Star y entrenador Ernest "Kiki" Vandeweghe, Coco ha unido su nombre a Venus Williams, que como ella también ha logrado los cuartos, y con la que podría enfrentarse en una de las semifinales.
"Es muy especial jugar contra la número uno y en un lugar tan especial, y es mi primera victoria sobre una número uno del mundo, creo", dijo Coco, que se ha medido a Garbiñe en tres ocasiones, con la última para la española en Cincinnati el año pasado, y las dos primeras para la estadounidense, sobre hierba en ambas, en Hertogenbosch y Wimbledon en 2014.
"No miro el cuadro", dijo sin saber quién sería su nueva rival. Jugué con ella en Cincinnati, y fue muy ajustado, creo. Ella es una dura rival, muy diferente a la de esta noche, trataré de dormir y estar recuperada para ese encuentro", señaló la estadounidense, 35 del mundo, especialista en hierba, con dos títulos en Hertogenbosch, en 2014 y 2016.
Tras su victoria contra la rumana Sorana Cirstea, Garbiñe había comentado sobre la posibilidad de enfrentarse a Coco Vandeweghe: "Es una jugadora incómoda, tiene mucha potencia en todos los golpes, saca bien. Puede jugar muy bien".
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