A pesar de que en 2019 llegaron a jugar dobles juntos, acaba de ser llamado “bully” y malvado por Stefanos Tsitsipas, y días antes del polémico enfrentamiento en tercera ronda de Wimbledon entre el griego y el australiano, Nick Kyrgios ya había escupido en dirección a un aficionado que lo estuvo molestando durante su duelo de primera ronda y se había quejado de una juez de línea acusándola de “chismosa”.
“No le haría eso a alguien que estuviera apoyándome. He estado viviendo con odio y negatividad por un largo tiempo, así que no le debo a esa persona nada… Hay una barda ahí y yo no puedo hacer nada físicamente ni decir nada porque me meto en problemas. Ellos creen que pueden decir cualquier cosa” confesó después en conferencia de prensa. En efecto, su popularidad tiene una razón de ser, pues aún con 27 años, Kyrgios primero dio de que hablar con sus distintos desplantes que por su real talento con la raqueta.
Irreverente, indisciplinado, polémico, pero también rompe paradigmas y esquemas. El tenis como muchos deportes está en constante evolución. Las audiencias cambian y Kyrgios para muchos representa ese necesario ingrediente de entretenimiento que le cae tan bien a un deporte tan individualista como el tenis. Genera rating y sus partidos están siempre llenos. Si bien tiene que pagar constantes multas, como ya lo hizo en la presente edición de Wimbledon, para algunos espectadores lo vale, pues conocedores del tenis no pueden negar que el actual No. 40 del mundo desborda talento, que ya le han valido ganar cinco títulos en el tour.
Uno de ellos llegó en 2019 en Acapulco, donde no se puede olvidar como sacó de quicio a Rafael Nadal durante la semifinal, a quien le aplicó un saque de cuchara. Después en Wimbledon 2019, confesó que en su duelo ante el español le tiró la pelota con toda la intención de “pegarle directo en el pecho”. Por supuesto el ganador de 22 Grand Slams ha dicho que el talento de Kyrgios está siendo desperdiciado.
En enero, durante el Abierto de Australia donde salió campeón en dobles varonil junto a Thanasi Kokkinakis, el australiano reveló que el coach de una pareja de rivales que venció lo retó a una pelea en el vestidor. Lo contó por Twitter, red social a la que suele acudir para dar a conocer sus opiniones y en donde más de una ocasión se ha visto envuelto en peleas escritas con gente dentro y fuera del deporte. Tal es el caso de Novak Djokovic, a quien llamó “extraño gato” tras toda la polémica por no haberse vacunado y haber acudido a su país. Con el serbio tiene otra larga lista de enemistado comportamiento, aunque recientemente han intercambiado elogios.
Djokovic is a tool. I don’t mind Bernie but his Mrs obviously has no perspective, ridiculous scenes ????????♂️ https://t.co/MMgeriH2GJ
— Nicholas Kyrgios (@NickKyrgios) January 18, 2021
Por otro lado, una de las más conocidas es cuando le dijo a otro ganador de Grand Slam como Stan Wawrinka, que su novia se había acostado con su amigo. Esto fue durante un partido lo cual le valió una multa del 10 mil libras y una suspensión de 28 días. Pase lo que pase con su carrera, no hay duda de que seguirá dando mucho de que hablar.