Carlos Alcaraz derrotó este domingo al noruego Casper Ruud en la final del Abierto de Estados Unidos y, de un solo golpe, alzó el primer título de Grand Slam de su meteórica carrera y se erigió en el número uno más joven del tenis masculino.
Alcaraz, 19 años y cuatro meses, se impuso a Ruud en Nueva York por 6-4, 2-6, 7-6 (7/1) y 6-3 en una final sin precedentes, en la que ambos jugadores podían conquistar a la vez su primer trofeo grande y el liderato de la ATP.
El español, que resistió a dos pelotas de Ruud para hacerse con el tercer set, es también el campeón de Grand Slam más precoz desde su compatriota e ídolo Rafael Nadal (Roland Garros, 2005), el gigante al que aspira a suceder.
Ganado el último punto, Alcaraz se desplomó en la pista, sonriendo y llorando de felicidad, y corrió a la grada a abrazarse con su padre, Carlos, y su entrenador, el ex número uno mundial Juan Carlos Ferrero.
"Nunca pensé que iba a lograr algo así a los 19 años", reconoció después ante la prensa. "Todo ha llegado tan rápido. Es algo que sueño desde que era un niño, desde que empecé a jugar al tenis".