En la actualidad el tenista mexicano Santiago González vive una carrera tenística de ensueño luego de ganar en el Abierto de Miami su primer Masters 1000, y que fue su título 20 en torneos ATP, además esta semana consiguió su mejor ranking mundial con el sitio 19 en la modalidad de dobles; sin embargo, no siempre fue miel sobre hojuelas para el veracruzano ya que le costó trabajo y dinero estabilizarse en el circuito.
Ahora Santiago ya cuenta con una estabilidad económica para continuar jugando los torneos ATP, y sus ganancias ascienden a casi tres millones de dólares, pero en los años 2000 tuvo que invertir para competir en torneos challengers e ITF, y las ganancias que obtenía en los torneos nacionales lo utilizaba para cubrir sus gastos.
Un ejemplo claro fue en el Campeonato Nacional de Puerto Vallarta en el 2008, donde González conquistó el primer lugar y quedándose con el premio de 150 mil pesos, además de un carro último modelo, y el cual vendió para seguir con su sueño de trascender en el circuito ATP.
“Lo voy a vender para cubrir mis gastos y continuar jugando en torneos internacionales”, mencionó González en aquella ocasión.
En ese año, González estuvo jugando torneos challengers e ITF, en la modalidad individual y dobles, y apenas tuvo como ganancias 11 mil dólares. En el 2009 consiguió ganancias de 22 mil dólares, pero ya se puso en los reflectores internacionales tras calificar al cuadro principal de Wimbledon, y donde se quedó en primera ronda en dobles.
Al siguiente año ya tuvo mayor participación en torneos ATP y conquistó su primer título del máximo circuito, y así en 2010 sus ganancias ya fueron de 76 mil dólares. La mejor ganancia anual que ha tenido el veracruzano fue el año pasado con 428 mil dólares, debido a que participó y avanzó más en torneos Masters 1000 y en los Grand Slam.
En cuatro meses que van del 2023, Santiago ha acumulado 333 mil dólares tras ganar 218 mil con el título del Miami open, por lo que seguramente Santiago en este año tendrá sus mejores ganancias y a sus 40 años de edad.
ZZM