Stan Wawrinka engrandece su leyenda. A los 38 años el campeón de tres Grand Slam y la Copa Davis, con pasado de N°3 del mundo, está en la final del ATP de Umag.
Se trata de su primera final en cuatro años, para ir en busca de su primer título en seis temporadas.
Para encontrar sus últimas definiciones hay que remontarse a Rotterdam y Amberes, en 2019, pero su último título fue en Ginebra 2017.
El helvético ahora derrotó al italiano Lorenzo Sonego (43°), segundo favorito, por un sólido 6-3 y 6-4 en su primera semifinal de ATP tras 10 meses.
Hace 10 meses, en septiembre de 2022, que jugó su última semifinal en el tour mayor, en Metz (cancha dura, bajo techo), en Francia, cuando se retiró ni bien empezado el partido frente al polémico kazajo Alexander Bublik. Allí había superado la qualy y dejó en el camino al ruso Daniil Medvedev, por entonces N°4 ATP.
Un mes después, el talentoso jugador suizo superó en su país, en Basilea, al noruego Casper Ruud, Nº3 del mundo en ese momento, tras ser finalista en Roland Garros y el US Open. "Esta es una razón por la que sigo jugando", había dicho Wawrinka.
En el medio, siguió en pleno sube y baja, hasta que esta semana, en Umag, en polvo de ladrillo, en Croacia, arribó a una nueva semifinal, ya que en el medio había jugado otra, pero a nivel de los Challengers.
Ahora, el 72° en el ranking mundial, tocará el Top 50, aunque irá por más ante el australiano Alex Popyrin (90°) que venció al italiano Matteo Arnaldi (76°), séptimo sembrado, y quiere su segundo título ATP.