Fue el 17 de agosto, y las redes lo reflejaron en cada una de sus versiones: Guillermo Vilas, el mejor tenista argentino de la historia (y el número uno del mundo en un tramo de los Setenta, aunque los libros oficiales aún no lo confirmen) cumplió 71 años. Y el mundo de su deporte se lo agradeció también de todas sus maneras posibles. Aunque el gran regalo, y los grandes abrazos, le llegaron en la intimidad: de su mujer Phiang y los cuatro hijos que dio vida con ella.
Rebobinemos... En mayo fue la última aparición de Willy Vilas en redes, luego de un año sin exposición mediática. Su esposa, Phiang Khumeang, compartió una fotografía junto al icónico tenista en su perfil de Instagram, y la imagen, tuvo gran repercusión en sus fanáticos, luego que supieran que padecía de una enfermedad degenerativa.
La mujer que Vilas eligió para formar su numerosa familia y pasar toda su vida acompañado, se mantiene muy activa en redes sociales. Aunque no suele compartir imágenes de su pareja, sí presume con orgullo a sus cuatro hijos: Andanin (19), Landinlao (13), Intila (12) y Junior (6).
La familia reside en Mónaco, donde los chicos que crecieron con la pasión por el tenis en sus venas, entrenan fuertemente para lograr una exitosa carrera como la de su papá, el ganador de 62 títulos que inspiró a toda una generación.
Luego del diagnóstico de Guillermo con su enfermedad neurológica que le ha provocado un importante deterioro cognitivo, su esposa, Phiang, tomó el mando de la Vilas Tennis Academy, las escuelas del ex tenista que ya cuenta con dos sedes: en Mallorca y Punta Cana.
Los hijos de Guillermo Vilas: una pasión que pasó de generación en generación
El 17 de agosto, como dijimos Guillermo Vilas cumplió 71 años, pero no hace falta una fecha específica para que la gente le acerque su incondicional cariño. Sólo basta mirar las redes sociales de su esposa, para leer la impresionante cantidad de mensajes llenos de amor que recibe a diario.
Hasta el día de hoy Guillermo es un modelo a seguir y sus hijos. No sólo eso: ellos viven la pasión que les sembró por la disciplina. Desde la mayor de sus hijas, hasta el más chiquito, todos, se destacan en las canchas y dejan el apellido Vilas bien en alto.
Tras su retiro, Guillermo se dedicó de lleno a ser coach de sus hijos: primero de Andanin, su primogénita de 19 años, y luego de sus otros hijos, hasta el último que nació en Buenos Aires en 2017.
Hay que recordar que Phiang y Vilas se casaron por civil en mayo de 2016, además de participar en una hermosa ceremonia religiosa, donde se prometieron amor para siempre.
La reciente confesión de Andanin, la primogénita de Guillermo Vilas
En una reciente entrevista con La Nación, la joven de 19 años habló de la intimidad de su vida familiar y cómo llevan a la par el amor por el tenis. Al ser consultada sobre cómo fue crecer en medio de los entrenamientos, contó: "En mi familia, si no entrenás, no comés. Así que tenías que entrenar todas las tardes, después del colegio: sino no a la casa", reveló la hoy también tenista.
Asimismo, se refirió a su mamá y contó que también fue una gran jugadora de tenis. "Mi mamá es la que dice: ‘Vos tenés que entrenar’. Jugamos todos los días excepto los domingos; esa es una regla de la casa. No se entrena los domingos", contó.
Andanin además relató que en su casa no se habla de tenis: "Disfrutamos de tiempo de calidad en familia". La joven se considera una gran admiradora de su madre: "Tiene cuarenta años, pero actúa como si tuviera veinte. Yo soy más vieja que ella mentalmente... Es muy divertida, pero hay que tener miedo cuando empieza a hablar en tailandés… Muchas personas nos dicen que cuando ella y yo nos hablamos y discutimos en tailandés damos miedo... Igual, es muy buena y divertida", reconoció.