La contundente derrota ante el Crystal Palace del pasado lunes (3-0) no sólo ha servido para desatar las iras de unos aficionados que ya no soportan más la mediocridad de su equipo, también ha resultado determinante para que los directivos del Arsenal tomen la firme decisión de levantar un nuevo e ilusionante proyecto.
Según cuenta el Daily Mirror, la entidad londinense estaría dispuesta a invertir nada menos que 200 millones de libras (alrededor de 235 M€) en el fichaje de los al menos siete jugadores que ha pedido el técnico Arsene Wenger: un portero, dos defensas, un centrocampista de largo recorrido, dos extremos y un delantero.
Aunque desde hace semanas vienen publicándose múltitud de nombres, este rotativo pone sobre la mesa los de los cancerberos Jordan Pickford (Sunderland) y Jack Butland, (Stoke City); el zaguero Kieran Tierney (Celtic de Glasgow); el extremo Wilfried Zaha (Crystal Palace), o los delanteros Moussa Dembélé (Celtic) y Alexandre Lacazette (Olympique de Lyon).
Igualmente, el tabloide añade que para financiar estas contrataciones, los gunners situarán en el escaparate a jugadores tan reseñables como el meta David Ospina; los centrocampistas Jack Wilshere y Mesut Özil, y los atacantes Alex Oxlade-Chamberlain, Lucas Pérez y Olivier Giroud. Casi nada.