El seleccionador de Alemania, Joachim Löw, que no convocó a ninguno de sus mejores jugadores a la Copa de las Confederaciones, consideró sin embargo este domingo este torneo como "un regalo", la víspera del debut de los campeones del mundo contra Australia.
"Para mí, la Copa de las Confederaciones es como un regalo. Nos ayudará a alcanzar nuestros objetivos el año próximo o más tarde y ayudará a progresar a nuestros jugadores", dijo el técnico en rueda de prensa.
"Es por ello que creo que esta Copa de las Confederaciones es increíblemente importante", añadió.
"Jogi", que ya anunció que daba prioridad a la Copa del Mundo de 2018, descartó deliberadamente a jugadores importantes como Mats Hummels, Jerome Boateng, Sami Khedira, Toni Kroos, Mesut Özil o Thomas Müller, sabiendo que el guardameta y capitán Manuel Neuer es baja por lesión (fractura de un pie).
Löw solo convocó a tres campeones del mundo de 2014 (Matthias Ginter, Shkodran Mustafi y Julian Draxler) en un grupo reducido a 21 jugadores, tras la baja por lesión de dos hombres.
Alemania presenta el efectivo más joven en la Copa de las Confederaciones (24 años y 4 meses).
"Nuestras estrellas no tienen miedo (por su plaza en el equipo), pero hay una especie de querer emular cuando llegan jugadores jóvenes. Debe haber ciertos cambios en los campeones del mundo. La lucha por un lugar en el equipo nos hace bien", estimó Löw.