José Mourinho mira al futuro con cierta preocupación. La directiva del Manchester United le prometió que haría los esfuerzos oportunos para reforzar su plantilla, pero las semanas van pasando y el único que ha aterrizado en Old Trafford hasta la fecha es el central sueco Victor Lindelöf (procedente del Benfica).
Hace unos días, la prensa de las islas desveló que esta situación estaba a punto de colapsar al técnico de Setúbal, quien no había dudado en exigir a los dirigentes que cerrasen el fichaje de un centrocampista y un delantero antes del domingo, día en el que la plantilla emprende viaje a Estados Unidos para la gira de pretemporada.
Este aviso a navegantes ha provocado que los diablos rojos intensifiquen contactos con Álvaro Morata y Romelu Lukaku, los dos grandes favoritos para reforzar el ataque. Igualmente, el club ha tratado de avanzar en la contratación de los mediocentros Nemanja Matic (Chelsea) y Eric Dier (Tottenaham), pero sus clubes de origen no están dando precisamente facilidades.
Para tratar de echar una mano en este sentido, Mou ha puesto sobre la mesa el nombre de otro centrocampista que resulta de su agrado, el alemán Julian Weigl (21 años). Dotado de una técnica notable y un sensacional compromiso defensivo, el jugador acaba de completar su segunda campaña con el Borussia Dortmund, conjunto que tampoco facilitará su marcha.