El presidente de la Juventus, Andrea Agnelli, fue condenado a un año de suspensión y 20 mil euros de multa por un caso de venta de entradas a grupos ultras, anunció este lunes la Federación Italiana de Fútbol (FIGC).
Otros tres dirigentes del campeón italiano recibieron la misma pena, mientras que el club deberá pagar una multa de 300 mil euros por la venta de estas entradas a grupos en los que estaban infiltrados miembros de la N'Dragheta, la mafia calabresa, que luego vendían los pases mucho más caros.
El fiscal del tribunal deportivo había solicitado dos años y medio de suspensión y la extensión del castigo a nivel europeo para Agnelli, que acaba de ser elegido presidente de la Asociación Europea de Clubes. Para la Juventus pidió dos partidos a puerta cerrada más la multa.
Este proceso ante la justicia deportiva sigue una investigación abierta por la fiscalía de Turín relativa a la venta de entradas por parte de la Juventus a los grupos ultras, entre los que se habría infiltrado la N'Drangheta.
El abogado del presidente de la Juventus pidió calma y anunció a la prensa que presentarían un recurso.
Ningún responsable del club turinés ha sido condenado por la vía penal en este caso. Andrea Agnelli únicamente ha comparecido como testigo. En particular, reconoció reuniones con Rocco Dominello, un ultra cercano a la N'Drangheta, condenado a más de siete años de prisión por este caso.
La justicia deportiva señala a la Juventus por haber cedido a los grupos ultras lotes completos de entradas, cuando solo está autorizada a vender cuatro al mismo tiempo.