El abucheo fue parejo para todos. La afición santista salió molesta, frustrada, decepcionada, por eso con el silbatazo final llegó la manifestación en contra por la derrota ante un rival como Atlas, que pudo llevarse cinco en contra, pero lo dejaron vivir y se llevó tres puntos muy valiosos, sobre todo en la cuestión del porcentaje.
Es grave la situación, se han encendido los focos rojos y ya no es cuestión de dirección técnica, la gente hasta pidió a gritos el regreso del 'Chepo' de la Torre, quizá sólo por manifestar que la falla está en quienes ejecutan en la cancha.
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Santos está a tiempo para hacer algo, si es que los jugadores quieren aportar.
Se cansaron de errar frente al arco, cayeron en los mismos errores que debieron haber corregido desde hace mucho tiempo y no tuvieron capacidad de respuesta después de que les hicieron el gol.
En la tribuna la gente estuvo apoyando, hubo buena entrada, pero en la segunda mitad del encuentro estaba claro que no llegaría el primer triunfo del torneo en casa, porque Jonathan Rodríguez entró a la cancha perdido, Furch no funciona como muchos otros y eso enojó a la gente, que comenzó a presionar cuando vio que no había por dónde.
Al finalizar el partido les gritaron de todo a algunos jugadores, evidentemente molestos, Abella hizo un berrinche cuando salió de cambio, una clara muestra de que el agua les ha llegado hasta el cuello.
Los que sí se fueron contentos fueron los seguidores del Atlas, los comenzaron a desalojar 15 minutos antes del final del partido, hubo connatos de bronca, la seguridad tuvo que multiplicarse para evitar un enfrentamiento dentro y fuera del estadio.
Santos ahora tiene que rescatar puntos de donde sea o seguirá complicando su situación, pero está a tiempo para hacer algo, si es que los jugadores quieren aportar.
Cabe mencionar que los jugadores fueron recibidos a su llegada al estadio con pancartas y cartulinas con muestras de apoyo.
Familiares y público trataron de motivarles para buscar su primer triunfo en casa en el Apertura 2017, pero de nada sirvió todo eso.
dcr