Christian Prudhomme, director del Tour de Francia, espera que el caso de Chris Froome, que dio positivo por salbutamol en un control en la pasada Vuelta a España, se resuelva lo antes posible. "Queremos que la situación se aclare y salir de la oscuridad y la ambigüedad. Queremos que se lleve a cabo la investigación y que no dure meses y meses para poder tener una respuesta de la UCI lo antes posible de cara a la próxima temporada", ha declarado el francés en France Info TV.
Debido a que el salbutamol no es una sustancia prohibida, sino que puede utilizarse dentro de unos límites que Froome superó en el doble en el control de la Vuelta, el ciclista británico no ha sido suspendido provisionalmente y tiene más margen de maniobra a la hora de defenderse. "El salbutamol no es una sustancia prohibida pero sí importa la cantidad que se toma. Por eso va a haber una batalla legal entre expertos", augura Prudhomme. Esa batalla legal podría dilatar el proceso en el tiempo. Justo lo que el patrón de la Grande Boucle no quiere que suceda.