Con complicaciones como estas tropezó la empresa Ernst & Young para realizar una auditoría al periodo 2010-2015 en la Ecuafútbol: “No existió un proceso de respaldo de información electrónica de usuarios activos ni pasivos”. “No consideró si documentos como las facturas de proveedores debían ser archivadas de forma central o electrónica”. “La FEF ha tenido problemas a la hora de encontrar con facilidad documentos, llegando a no ubicarse varios documentos de respaldo”.
Pese a los inconvenientes la auditoría establece, entre otras irregularidades, pagos a “proveedores cuya actividad comercial registrada en el Servicio de Rentas Internas (SRI) es distinta a la registrada en el sistema contable” de la FEF. Por ejemplo, Verónica González, que según el SRI cumple “actividades para la terminación o acabados de edificios u otra obra”, cobró $ 91.253, según los registros contables de Ecuafútbol por “servicios de publicidad”.
Aunque en el SRI Gerardo España se registra en “actividades jurídicas” la Ecuafútbol le pagó $6.669 por “servicios de publicidad”. Pero, además, según los registros contables de la Federación Rodrigo Torres cobró $72.097 por “instalación de cielo raso y pasamanos”, aunque según el SRI cumple “actividades de transporte de pasajeros por carretera”.
En su informe Ernst & Young dice: “Identificamos incrementos salariales y de honorarios a algunos funcionarios de la FEF entre los años 2012 y 2014, de los cuales no observamos la aprobación del directorio. Y, excepto en el 2012, no hemos observado la aprobación formal del presidente (cargo de Luis Chiriboga hasta el 2015)”.
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Se destaca que de los aumentos salariales a cuatro funcionarios en el 2014, respecto al 2013, no hay respaldo “formal” de la aprobación del directorio ni de Chiriboga. Sin embargo, Guillermo Saltos Guale (síndico), y Francisco Acosta (secretario) pasaron de cobrar $ 84.000 al año cada uno a recibir $ 90.000 anuales. Hugo Mora (tesorero), de $ 72.000 en el 2013 a $ 90.000 anuales en el 2014; Vinicio Luna (coordinador), de $ 60.000 a $ 72.000 al año.
“La administración de la FEF indicó que no se mantenían procedimientos formales de aprobación de incrementos salariales. La práctica utilizada para la aprobación de los mismos era obtener la rúbrica de Luis Chiriboga, presidente de la FEF, en oficios”. (D)