Las Águilas superaron por un holgado marcador de 7-38 a los Vikingos, para consagrarse por tercera vez en su historia como Campeones de la Conferencia Nacional; las dos anteriores fueron en 1980 y en 2004.
A pesar de que Minnesota de se puso al frente, con Touchdown de Kyle Rudolph, el cuadro de Filadelfia fue paciente y encontró su ritmo, empatando el duelo con un regreso de intercepción, por parte de Patrick Robinson, y posteriormente dando la vuelta al encuentro con una corrida de Blount.
A partir de eso las Águilas fueron dueñas del encuentro. La defensiva siguió jugando un papel importante, cuando Barnett le soltó un balón a Kase Keenum, el cual fue recuperado por Chris Long. Tras esto, Foles conectó un pase de anotación con Alshon Jeffrey.
Con ventaja de 7-24, el dominio de Filadelfia se confirmó en el segundo medio. El mariscal de las Águilas puso dos pases de anotación más, para poner el 7-38 definitivo, completando un juego con 352 yardas aéreas. La defensiva siguió en plan grande, misma que detuvo en dos ocasiones dentro de zona de puntos a la ofensiva de Minnesota.
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