Ayer por la noche, en el marco de la tercera fecha de la zona 1 de la Reválida del Torneo Federal A, el cuadro portuario consiguió sus primeros tres puntos del 2018 al vencer al Albinegro por 1-0.
Era un partido bisagra para el visitante. Es que luego del empate frente a Independiente de Neuquén en el Abel Sastre y tras haber tenido fecha libre, tenía que buscar afuera lo perdido en casa. Con actitud y sacrificio, los de Luis Murúa pudieron sacarlo adelante.
Enfrente tuvo un contrincante que llegó entonado después de golear al Rojo neuquino. Las acciones no fueron de las más vistosas, sin embargo, ambos contaron con aproximaciones para abrir el marcador.
El equipo que dirige Luis "Piti" Murúa desperdició un mano a mano increíble que derivó de un envío aéreo y el dueño de casa tuvo sus llegadas, no tan claras, pero que hicieron que el arquero Alan Depotte responda de buena manera en unas cuantas oportunidades. Sin embargo, en el ping pong, las de mayor riesgo fueron para el Depo.
Para eso lo trajeron. Mc Coubrey, delantero de experiencia que llegó en enero a Madryn, aprovechó un desborde de Blas Tapparrello, quien fue asistido por el eterno Rodrigo Bona, para abrir el marcador, en lo que fue la única emoción de la noche.
El pitido final del bahiense Fernando Marcos dejó una satisfacción enorme en la delegación aurinegra. Con 4 puntos, es el líder de la zona y el venidero lunes buscará ratificar el buen comienzo, cuando reciba a Rivadavia de Lincoln.