La vida no es justa y en el mundo deportivo, eso no cambia. Solo hace falta ver que Jimmy Garoppolo, con siete inicios en su carrera, gana cinco millones de dólares al año más que Aaron Rodgers, dos veces ganador del MVP.
Eso podría cambiar pronto, sin embargo.
La noche del martes ESPN reportó que los Green Bay Packers ya comenzaron las negociaciones para extenderle el contrato a Rodgers, de 34 años, a pesar de que aún tiene dos temporadas vigentes en el pacto de 110 millones que acordaron en 2013.
Para los Packers es imperativo tener a Rodgers satisfecho, pues solo con él la ventana de un nuevo título permanece abierta de manera indefinida. Pero no será barato, pues el mismo Rodgers ya dejó entrever el año pasado que no habrá ningún descuento para la única franquicia que ha defendido en la NFL.
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— NFL (@NFL) 28 de febrero de 2018
“Conozco mi valor en esta liga y sé que el equipo me aprecia. Voy a seguir volviéndome una parte imprescindible de este roster. Cuando haces eso y llega el momento de un contrato, por lo general obtienes una extensión”, dijo en su momento.
Y tiene razón, no hace falta ver a los siete quarterbacks que lo superan en salario anual promedio para darse cuenta de la valía que tiene Rodgers. De ellos, solo Drew Brees y Joe Flacco tienen -al igual que Rodgers- tienen un anillo de campeonato.
El resto Garoppolo, Matthew Stafford, Derek Carr, Andrew Luck y Alex Smith tienen en total los mismos 16 inicios de postemporada de Rodgers, con la diferencia de que el pasador de Green Bay acumula nueve triunfos por solo cinco de sus millonarios colegas.
Esa simple estadística, sin incluir sus innumerables logros, hace de Rodgers el candidato perfecto para convertirse en el primer jugador en rebasar la barrera de los 30 millones de dólares anuales en la NFL. Y al parecer el equipo está dispuesto a complacerlo. Tampoco es que tengan muchas más opciones.
Para Rodgers es evidentemente importante que su valor para los Packers se refleje en su chequera, pero ya con 34 años y con problemas de lesiones que vienen de la mano de su estilo de juego también debe definir qué viene primero, si el dinero o la posibilidad de más títulos.
A pesar de ser perennes favoritos al Super Bowl cada año, los Packers parecen irse rezagando cada vez más en la NFC y un contrato récord como el que podría obtener Rodgers podría perjudicar en gran medida la capacidad de Green Bay para rodearlo del talento suficiente para mantenerse en contienda ante equipos más jóvenes y con mejor situación contractual.
Si alguien merece ser el primer jugador de 30 millones de dólares en la NFL, es Rodgers. Y si alguien merece otro título del Super Bowl, también es Rodgers. Pero, volvemos a lo mismo, la vida no es justa y el deporte no es la excepción.