Otro de esos casos surrealistas que solo el VAR puede generar. En la Bundesliga se vivió un hecho sin precedentes, luego de que el juez del encuentro entre el Mainz 05 y Friburgo ordenara a todos los jugadores regresar de los vestuarios al campo, en el entretiempo, para sancionar un penal que no advirtió, pero que terminó cobrando gracias al videoarbitraje.
Mainz y Friburgo habían igualado sin goles al final de la primera parte, el juez Guido Winkmann se dirigía también a vestuarios junto a sus asistentes, y los jugadores -casi todos- ya estaban en vestuarios. Sin embargo, al colegiado le avisaron de una falta que no había cobrado en el área, justo en la última acción.
De inmediato y tras las coordinaciones con los jueces responsables del VAR, cobró el penal por una mano de un defensor de la visita y ordenó a todos los futbolistas retornar al campo para ejecutar la pena máxima.
El argentino Pablo De Blasis se encargó de transformar la surrealista falta en gol y ahora sí, todos al descanso. Finalmente, el Mainz se impuso 2-0 gracias a otro tanto de De Blasis, quien así completó su doblete y dejó la pelea por la baja al rojo vivo.
A falta de dos fechas para el final del certamen, ambos cuadros están igualados en 30 puntos, pero el Mainz se está salvando por mejor diferencia de goles.