"El mérito de River es haber conseguido la victoria como local. En lo anímico no hay que trabajar porque estos muchachos están de pie, entonces tenemos fe que la vamos a dar vuelta. Necesito recuperar a los jugadores y tenerlos bien para definir esta vida en los 90 minutos y dejar la piel en la Bombonera", sentenció el técnico del 'Xeneize' en conferencia de prensa.
"No volví a ver la acción del penal. La planificación no te la cambia, sino los estados de ánimos porque la satisfacción de un gol tranquiliza a uno e intranquiliza a otro. Teníamos que ganar diez metros más de lo que habíamos hecho en el partido por el torneo local. Al tener que revertir el resultado concedes espacios y te expones a la contra. Los detalles en este tipo de partido te hacen ganar o no te permiten convertir", analizó sobre el trámite del juego.
En relación a la estrategia que adoptó su equipo en el complemento, el entrenador de Boca expresó: "En el segundo tiempo quería ver si podíamos tener la pelota en la mitad de la cancha para hacer daño cuando rompíamos la primera presión de River. Pero lamentablemente sabíamos que nos exponíamos a contragolpe y perdimos 2-0. Pero no está sentenciada la serie y vamos a dejar la piel para tratar de revertirla".
"Le mostré a los jugadores la cantidad de faltas simuladas de los jugadores de River y lo importante es cómo se medían distinto las diferentes jugadas. Sabemos que River trabaja un montón de detalles y tenemos que estar atentos a este tema", concluyó.
El encuentro decisivo de esta serie superclásica argentina se disputará el próximo 22 de octubre en la Bombonera y el vencedor cruzará con el ganador del cruce brasileño que protagonizarán Flamengo y Gremio.