New York Jets, en su derrota 22-17 ante los Buffalo Bills, mostró poco ánimo y falta de valor para emprender acciones.
Y es que la actitud de los Jets este jueves en el Metlife Stadium solo puede ser catalogado de esa forma. La ofensiva de Jets, comandada por Ryan Fitzpatrick echó a perder una magnífica jugada por parte de sus equipos especiales y además desaprovechó una ofensiva en una privilegiada posición de campo que les pudo haber dado el triunfo.
No fue la noche de los Jets, que al final tuvieron otra oportunidad, que se fue por tierra al ser interceptados, pero sí fue la noche de su ex coach Rex Ryan, que con los Bills logró un triunfo que le supo a gloria, por tratarse de sus ex dirigidos.
Los Bills no podían permitirse otra derrota si todavía querían pelear por un boleto como wild card. Su defensa se aplicó al máximo y aunque en el último cuarto sufrieron un susto, los errores de los Jets les entregaron el juego.
Pero si la defensiva de los Bills cumplió, mención honorífica merece el corredor novato Karlos Williams, quien logró su sexto touchdown consecutivo de la temporada y es una auténtica revelación.
De los Jets, más allá de la reacción en el último cuarto poco hay que destacar. Ryan Fitzpatrick se fue con 193 yardas y dos touchdowns, pero también con dos intercepciones. No fue la noche de los Jets, y cuando pudo serlo, la dejaron ir.